Un grupo de 17 gobernadores republicanos escribió a la administración Biden y a los líderes del Congreso, instándolos a tomar medidas para evitar que el Partido Comunista Chino (PCCh) compre tierras estadounidenses.
En una carta fechada el 4 de diciembre, encabezada por la gobernadora de Arkansas, Sarah Huckabee Sanders, los gobernadores republicanos le pidieron al presidente Joe Biden, a la secretaria Janet Yellen, al presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (R-La.), al líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), al líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries (D-N.Y.), y al líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), que aborden la amenaza del PCCh.
«Numerosos gobernadores y legislaturas estatales han tomado medidas para proteger a nuestros ciudadanos de la inminente amenaza del Partido Comunista Chino (PCCh) a la seguridad nacional», dijeron los gobernadores. «Pero la seguridad nacional exige una respuesta nacional de los líderes nacionales. La responsabilidad ahora es de ustedes: Seguir el ejemplo de nuestros estados e impedir que el PCCh acumule tierras estadounidenses».
La carta señalaba que, si bien la administración Biden no actuó, 11 estados promulgaron leyes de propiedad extranjera en 2023, y Arkansas se convirtió en el primer estado en aprobar una ley de este tipo.
«Durante demasiado tiempo hemos permitido que gobiernos peligrosos y adversarios se infiltren en nuestro país», advertía la carta. «Nuestros estados ya no tolerarán tales concesiones. La administración Biden debe tener en cuenta el hecho de que tales entidades son simples amenazas a nuestra seguridad nacional, a nuestros agricultores y a nuestra ciudadanía».
«Esto es especialmente cierto desde que el PCCh promulgó una ley en 2017 que exige a los ciudadanos chinos en el extranjero colaborar con los funcionarios de seguridad chinos en el trabajo de inteligencia», señalaron los gobernadores.
La carta citaba un caso en el que Gotion, un fabricante de baterías para vehículos eléctricos controlado por el PCCh, compró 270 acres para su planta en Green Charter Township, Michigan, que no está lejos del centro de entrenamiento militar Camp Grayling. «Desafortunadamente, el Comité de Inversión Extranjera en Estados Unidos se negó a bloquear, o incluso revisar, esta transacción claramente alarmante».
Los gobernadores elogiaron algunos esfuerzos del Congreso para abordar este tema e instaron a los legisladores a codificar esta posición en una ley.
«Hasta que el Congreso apruebe dicha legislación, instamos a la Administración Biden a utilizar todas las herramientas disponibles para evitar la continua adquisición de tierras estadounidenses por parte de gobiernos y entidades extranjeras adversarias», decía la carta.
Esfuerzos legislativos
Según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), China posee casi 384,000 acres de tierras agrícolas estadounidenses, lo que representa el 0.9 por ciento de todas las tierras agrícolas estadounidenses propiedad de entidades extranjeras a finales de 2021.
En particular, la propiedad de tierras agrícolas estadounidenses por parte de China aumentó un 55 por ciento, de 247,000 acres en 2019 a 384,000 acres en 2021, mientras que durante el período 2016-2019, el aumento de la propiedad de tierras estadounidenses por parte de China fue inferior al 1 por ciento. En 2010, China sólo poseía 13,720 acres.
Hay algunos casos de alto perfil relacionados con la compra de tierras estadounidenses por parte de China cerca de instalaciones militares sensibles. En 2021, la empresa alimentaria china Fufeng compró 370 acres de tierras agrícolas para construir una planta de molienda de maíz cerca de la Base de la Fuerza Aérea de Grand Forks, en Dakota del Norte.
En 2016, la empresa china Guanghui Energy, propiedad del multimillonario Sun Guangxin vinculado al PCCh, supuestamente compró 140,000 acres de tierras agrícolas en Del Rio, Texas, a sólo 80 millas de la Base de la Fuerza Aérea Laughlin.
Mientras tanto, se están realizando esfuerzos legislativos a medida que los legisladores han introducido legislaciones para luchar contra las amenazas del PCCh.
En julio, el Senado de Estados Unidos aprobó una enmienda ofrecida por el senador Mike Rounds (R-S.D.) para prohibirle a China y a otros adversarios extranjeros la compra de tierras y empresas agrícolas estadounidenses. La enmienda se incluirá en la versión del Senado de la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA) para el año fiscal 2024.
En marzo, el senador Tom Cotton (R-Ark.) y la senadora Katie Britt (R-Ala.) presentaron una legislación titulada «Ley Ni una pulgada o un acre más» para prohibirle a China poseer tierras estadounidenses, incluidas tierras agrícolas y otros bienes inmuebles. El proyecto de ley además le otorga al presidente de Estados Unidos la autoridad para exigir una venta si la propiedad existente se considera un riesgo para la seguridad nacional.
El senador Josh Hawley (R-Mo.) también presentó un proyecto de ley en marzo que prohibiría a las entidades vinculadas al régimen chino comprar o arrendar tierras agrícolas estadounidenses. La legislación también exige que los propietarios existentes se deshagan de sus intereses en virtud del proyecto de ley o se enfrentarán a multas y repercusiones penales.
En febrero, el senador Mike Rounds (R-S.D.) presentó un proyecto de ley para prohibirle a China, Rusia, Irán y Corea del Norte la compra o arrendamiento de tierras y empresas agrícolas estadounidenses. La legislación también convierte al secretario de Agricultura en miembro permanente del Comité de Inversión Extranjera en Estados Unidos (CFIUS).
Terri Wu contribuyó a este artículo.
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