Los practicantes estadounidenses de la disciplina espiritual Falun Dafa presentaron una lista de funcionarios chinos que cometieron violaciones de derechos humanos, instando al Departamento de Estado de EE.UU. a denegar la entrada de esos funcionarios en Estados Unidos, según el sitio web estadounidense Minghui.org.
La lista fue presentada luego de que a principios de año, las autoridades estadounidenses notificaran que el Departamento de Estado aumentaría el escrutinio de las solicitudes de visa de los funcionarios extranjeros que han participado en graves violaciones de la libertad religiosa, según un comunicado del 23 de julio de Minghui, que cumple la función de un centro de intercambio de información sobre la persecución a Falun Dafa en China.
Un funcionario aconsejó a los practicantes de Falun Dafa en Estados Unidos que presentaran una lista de funcionarios chinos que se sabe están involucrados en la persecución, según el comunicado.
Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una práctica espiritual que ha sido brutalmente perseguida por el Partido Comunista Chino (PCCh) durante los últimos 20 años. La disciplina –que consiste de ejercicios de meditación y un conjunto de enseñanzas morales centradas en los principios universales ‘Verdad, Benevolencia y Tolerancia’– ganó una gran popularidad en la década de 1990, y se estima que entre 70 a 100 millones de personas lo practicaban en China hacia finales de la década, según estimaciones oficiales de ese período.
Temiendo que la enorme popularidad de la práctica amenazara la autoridad del Partido, el entonces cabecilla Jiang Zemin lanzó una persecución a nivel nacional el 20 de julio de 1999.
Los practicantes ha sido, y siguen siendo, encarcelados, torturados y asesinados por negarse a renunciar a su fe. En todo momento, cientos de miles de adherentes están encarcelados en China por su fe, según estimaciones del Centro de Información de Falun Dafa.
El centro de información, junto a la Organización Mundial para Investigar la Persecución a Falun Gong (WOIPFG), enviaron al Departamento de Estado una lista detallando los nombres, cargos anteriores y actuales, y los abusos perpetrados por los funcionarios chinos involucrados en la persecución, dijo el 23 de julio a La Gran Época, Lai Shantao, presidente de la Asociación Falun Dafa de Washington.
Los individuos nombrados en la lista trabajaron en una variedad de departamentos estatales, incluyendo funcionarios del departamento de propaganda, médicos involucrados en la sustracción forzada de órganos de practicantes de Falun Dafa encarcelados, guardias de prisiones y funcionarios de la “Oficina 610” –una fuerza policial secreta extrajurídica dedicada a llevar a cabo la persecución contra Falun Dafa. La diversidad de departamentos representados en la lista refleja cómo el PCCh movilizó a todo el aparato estatal para suprimir la fe, dijo Lai.
Agregó que la asociación en Washington tiene la intención de presentar más listas de nombres en el futuro.
“Creemos que esta prohibición de visas es un vehículo realmente poderoso para frenar las violaciones a la libertad religiosa de los practicantes de Falun Gong en China”, dijo.
“En los últimos 20 años, el número de perpetradores es probablemente de decenas de miles en todo el país. Así que planeamos seguir recopilando las pruebas y enviando sus nombres al Departamento de Estado”.
Bajo la Sección 212(a)(2)(G) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de Estados Unidos, cualquier persona que ejerza como funcionario de un gobierno extranjero y sea responsable de violaciones particularmente graves a la libertad religiosa es inadmisible para entrar a EE. UU.
Un funcionario del departamento de Estado confirmó la recepción de la lista y dijo que el departamento tomará las medidas apropiadas en todos los casos, según el comunicado de Minghui.org. El funcionario también dijo que a varios funcionarios chinos en los últimos años se les denegó la visa estadounidense debido a su papel en la persecución contra los practicantes de Falun Dafa.
Hay varias leyes que prohíben el otorgamiento de visas a abusadores de los derechos humanos, dijo el funcionario, incluyendo leyes que también niegan visas a los cónyuges e hijos de los perpetradores, según el comunicado.
Lai dijo que aunque algunos perpetradores no tienen planes de visitar Estados Unidos, muchos están dispuestos a enviar a sus hijos a vivir o estudiar en ese país.
“Realmente no quieren que se les cierre este camino”, dijo.
La reciente noticia de que el Departamento de Estado intensificó sus esfuerzos para endurecer los controles de inmigración a los violadores de la libertad religiosa ya tuvo un fuerte impacto en China, dijo Lai.
Señaló que los informes de Minghui.org indicaban que algunos centros de detención en China retiraron recientemente de sus paredes las fotografías de oficiales de la policía local, lo que sugiere que las autoridades temen que sus nombres sean expuestos.
El Departamento de Estado no respondió a una solicitud de comentarios de prensa al cierre de esta edición.
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