Estados Unidos perdería una guerra contra China por el futuro de Taiwán a menos que aleje sus prioridades de defensa de Europa, según un republicano de alto rango.
El senador Josh Hawley (R-Mo.) dijo que Estados Unidos se había excedido en su apoyo a la defensa de Ucrania contra la invasión rusa y que no podría disuadir a China sin antes retirarse de Ucrania.
“China está en marcha y en este momento no estamos preparados para detenerlos”, dijo Hawley durante una charla del 16 de febrero con la Fundación Heritage, un grupo de expertos conservador.
“Si China invadiera Taiwán hoy, prevalecerían”.
Hawley culpó al hecho de que Estados Unidos está dedicado a proporcionar armas y otra ayuda a Ucrania, situación que consideró el reflejo de un deseo de “imperio liberal” por parte de los neoconservadores y los globalistas.
Dijo que la ambición de promover la democracia y los valores liberales en todo el mundo no era sostenible y que el poder militar de Estados Unidos era un recurso finito que se agota por el esfuerzo.
“El problema central es que nuestras acciones en Ucrania están afectando directamente nuestra capacidad para disuadir a nuestro adversario más apremiante en el Pacífico”, dijo Hawley.
El senador afirmó además que la guerra en Ucrania y la de Taiwán requerirían “muchas de las mismas armas”, aunque los informes que exploran el tema de la disponibilidad de municiones para una guerra en Taiwán sugieren que esto no es cierto.
Del mismo modo, Hawley criticó a la administración Biden por dar más importancia a la lucha contra el cambio climático que a prepararse para la posibilidad real de una guerra con China. La idea cobró mayor fuerza cuando el discurso de Hawley fue interrumpido por un manifestante que gritó que el cambio climático, no China, era el enemigo.
“Un futuro oscuro”
Hawley advirtió que el Partido Comunista Chino (PCCh), que gobierna China como un estado de partido único, ha estado tramando la toma de control de Taiwán durante mucho tiempo. El líder del PCCh, Xi Jinping, señaló, con frecuencia ha hecho afirmaciones jurando cumplir con esa ambición.
“Invadir Taiwán ha sido el objetivo de Xi durante años”, dijo Hawley.
“Mi preocupación es que, si no cambiamos de rumbo, es posible que no podamos hacer nada al respecto”.
El PCCh afirma falsamente que Taiwán es una provincia separatista de China que debe unirse al continente. Sin embargo, Taiwán nunca ha sido controlado por el PCCh y su gobierno democrático viene desde la Guerra Civil China, cuando el PCCh fue incapaz de derrocarlo.
Por su parte, Estados Unidos reconoce formalmente, pero no respalda, la posición del PCCh y mantiene obligaciones legales de proporcionar armas a Taiwán para su autodefensa.
Taiwán también es un socio comercial importante de Estados Unidos y fabrica la gran mayoría de sus chips semiconductores avanzados, que se utilizan en todo, desde camionetas modernas hasta misiles hipersónicos.
Estados Unidos y el mundo comparten una dependencia económica tanto de Taiwán como de China, dijo Hawley, y una invasión comunista china a la isla sería catastrófica, posiblemente sentando las bases para la erosión del propio Estados Unidos.
“Según algunas estimaciones, la guerra por Taiwán nos llevaría a una profunda recesión sin una salida clara”, dijo Hawley.
Del mismo modo, dijo Hawley, al atravesar la Primera Cadena de Islas que se extiende desde Japón hasta Indonesia, China podría asegurar su presencia militar en todo el mundo y difundir su campaña de coerción, intimidación y dominación.
“Imagínese un mundo donde los buques de guerra chinos pudieran patrullar las aguas de Hawái”, dijo Hawley, “y los submarinos chinos pudieran acechar la costa de California. Imagine un mundo donde el Ejército Popular de Liberación tenga bases militares en América Central y del Sur. Imagine un mundo donde las fuerzas chinas operen libremente en el Golfo de México y el Océano Atlántico”.
“Ese es el futuro al que nos enfrentaremos si finalmente no podemos detener a China. Es un futuro oscuro. Es un futuro cada vez más plausible. Pero no es un futuro inevitable”.
Se necesita una nueva estrategia de política exterior
Hawley dijo que Estados Unidos necesitaría aplicar una política exterior nacionalista para evitar que ese oscuro futuro se materialice, una política que aborde la situación geopolítica con “realismo lúcido” y reconoció que disuadir la invasión de Taiwán por parte de China debería ser el “principal objetivo de la política exterior de Estados Unidos”.
Como tal, dijo, el gasto y la postura de defensa de la nación deberían estar orientados en el Pacífico, no en Europa, y Estados Unidos tendría que reducir o incluso poner fin a su compromiso con Ucrania.
“Fortalecer la disuasión en el Indo-Pacífico significa reducir nuestros compromisos militares en Europa”, dijo Hawley.
Esto no significaría abandonar la alianza de la OTAN, agregó. Más bien, Hawley argumentó que Estados Unidos y sus aliados de la OTAN tendrían que llegar a un acuerdo de distribución de la carga más equitativo, en el que las potencias europeas tuvieran la primera prioridad para responder a las amenazas en Europa y Estados Unidos lo hiciera a las amenazas en el Indo-Pacífico.
“La política actual de Estados Unidos de pretender que puede hacer todo por los europeos en Europa y que puede hacer todo [en] el resto del mundo [y] en Asia es simplemente fantasiosa y no puede sostenerse”, dijo Hawley.
“Europa es importante para nosotros, pero no es la clave, y es hora de que se lo digamos a nuestros aliados de la OTAN sin rodeos”.
En última instancia, dijo Hawley, el reposicionamiento de las prioridades de defensa estadounidenses de Europa al Indo-Pacífico es fundamental para prevenir un conflicto catastrófico entre Estados Unidos y China.
Solo conservando los recursos que se gastan en Ucrania y en otros lugares, dijo, se puede asegurar esa disuasión.
“Si no detenemos a China en Asia, nada de lo que hagamos contra China en ningún otro lugar importará mucho”, dijo Hawley.
“Este país es el país más fuerte sobre la faz de la tierra… Prevaleceremos. Pero debemos tomar decisiones ahora para asegurarnos de que esa posibilidad se haga realidad”.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.