Israel, un país altamente vacunado, registró esta semana el mayor número de infecciones diarias per cápita por el virus del PCCh, ya que el Ministerio de Sanidad del país anunció que, en promedio, se están registrando más de 10,700 nuevos casos de COVID-19 al día.
El director general del Ministerio de Sanidad, Nachman Ash, dijo durante una videollamada el 14 de septiembre que las nuevas cifras son «un récord que no existía en las oleadas anteriores», reportó The Times of Israel.
«Hace una semana estábamos en una clara tendencia a la baja; en los últimos días hemos visto que ese descenso se ha detenido, y la cifra de reproducción del virus está [de nuevo] por encima de 1», dijo Ash. Los valores «por encima de 1» indican que el número de casos está aumentando, mientras que «por debajo de 1» significa que está disminuyendo.
Aunque los casos positivos vuelven a aumentar, las personas que enfermaron gravemente de COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), disminuyeron en comparación con las cifras de las semanas anteriores. Ash señaló que, en promedio, las personas que cayeron gravemente enfermas aumentaron diariamente en unos 70 u 80 nuevos pacientes.
Israel, que ha utilizado principalmente la vacuna de Pfizer Inc. y BioNTech, ha inoculado por completo hasta ahora a unos 5.56 millones de personas, o el 61.45%, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
La semana pasada, Ash dijo que el número de personas que aún no han recibido ninguna dosis de la vacuna se ha reducido a menos de un millón. Israel tiene una población de 9.3 millones de personas.
El país comenzó a ofrecer vacunas de refuerzo contra el COVID-19 a niños de hasta 12 años el 29 de agosto, y el primer ministro Naftali Bennett dijo que una campaña que comenzó en julio entre las personas mayores ha frenado el aumento de enfermedades graves causadas por la variante delta. Actualmente, unos 2.7 millones de israelíes han aceptado la vacuna de refuerzo.
El 12 de septiembre, Ash dijo, durante una entrevista con Radio 103FM, que el país está trabajando para asegurarse de que tendrá suficientes vacunas contra el COVID-19 para una posible segunda ronda de dosis de refuerzo, aunque un estudio reciente de varios científicos importantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) encontró que la población en general no necesita una dosis de refuerzo.
«Las vacunas se desvanecen con el tiempo, y después de seis meses, disminuyen significativamente mientras que las personas se infectan incluso después de dos vacunas», dijo Ash, respondiendo a una pregunta sobre la posibilidad de una cuarta dosis de la vacuna COVID-19. «No sabemos cuándo se aprobará la vacuna, espero que no sea dentro de medio año como esta, pero la tercera vacuna durará más tiempo. Estamos empezando a prepararnos para tener reservas de vacunas en caso necesario», continuó.
La OMS instó a principios de este mes a los países a retrasar la administración de las vacunas de refuerzo contra el COVID-19 hasta septiembre, para que las naciones más pobres puedan proporcionar a sus ciudadanos la primera dosis de la vacuna.
Salman Zarka, director del Centro Médico Ziv de Safed, que se unió a Ash durante la reunión del 14 de septiembre, dijo que el 50% de los casos confirmados el 13 de septiembre eran de niños, y añadió que el país está trabajando con la hipótesis de que posiblemente en el futuro tendrá que hacer frente a una quinta oleada del virus del PCCh.
Israel informó de un total de 32 muertes el 15 de septiembre, según Johns Hopkins. El número de muertes desde el inicio de la pandemia del virus del PCCh ascendió a 7438.
De NTD News
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