El Gobierno italiano prohibió este miércoles desembarcar a un total de 165 pasajeros bengalíes que viajaban en dos vuelos aterrizados en Roma y en Milán, y que serán repatriados a su país, un día después de que entrara en vigor el bloqueo a los vuelos procedentes de Bangladesh.
Los dos vuelos procedían de Qatar, el primero de ellos llegado a Roma con 125 pasajeros bengalíes y el segundo al aeropuerto de Malpensa, en Milán (norte), con otras 40 personas de ese país, que serán devueltas a Bangladesh en los mismos aviones en los que llegaron, según informaron los medios locales.
El resto de pasajeros del vuelo aterrizado en Roma, que hizo la ruta Pakistán-Qatar-Italia, están siendo sometidos a pruebas del virus del PCCh, comúnmente conocido como nuevo coronavirus, mientras que una pasajera bengalí ha sido trasladada a un hospital por estar embarazada.
Ayer el Ministerio de Sanidad prohibió los vuelos que llegaran desde el país asiático por el «número significativo de casos positivos de COVID-19» que se registraron en el último vuelo llegado a Roma directo desde Dacca, la capital bengalí.
De los 276 pasajeros de ese vuelo, que aterrizó ayer en el aeropuerto de Fiumicino, hay por lo menos 36 casos positivos, todos ellos trasladados al hospital de enfermedades infecciosas Lazzaro Spallanzani de Roma, mientras se espera el resultado del resto de pruebas.
El titular de Sanidad, Roberto Speranza, envió este día una carta a la comisaria europea de Salud y al ministro del ramo alemán pidiendo «nuevas y rigurosas medidas cautelares para las llegadas del exterior del espacio Schengen».
También anunció días atrás que Italia seguiría ordenando una cuarentena obligatoria de 14 días para todos aquellos ciudadanos provenientes de fuera de Schengen, además de incluir la posibilidad de someterles a una prueba del COVID-19.
En los últimos días se ha certificado en la región del Lacio, cuya capital es Roma, un brote del virus del PCCh que suma ya 39 positivos, la mayoría bengalíes que residían en Italia y que volvían después de retomarse los vuelos con los países exteriores de la Unión Europea.
En este balance no se incluyen los 276 pasajeros del vuelo que aterrizó ayer, la mayoría aún a la espera del resultado del test.
El viceministro de Sanidad, Pierpaolo Sileri, dijo esta mañana en una entrevista radiofónica, que podría haber alrededor de 600 casos entre la comunidad bengalí.
Las autoridades sanitarias pusieron a disposición de todos los bengalíes residentes en el Lacio unos test rápidos que se pueden realizar desde el coche, a los que deberán someterse los alrededor de 25,000 ciudadanos del país asiático que residen en Roma.
Bangaldesh vive actualmente una rápida expansión del virus, con más de 169,000 casos y aumentos de alrededor de 3000 casos diarios.
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