La administración del presidente Joe Biden recibió el viernes por la noche la petición de detener las órdenes de uso de mascarillas y de vacunación para los trabajadores y voluntarios del programa Head Start de Texas.
Al parecer, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) actuó sin la autorización del Congreso cuando impuso los mandatos en respuesta a la presión del presidente para aumentar las vacunas contra el COVID-19, dijo el juez de distrito estadounidense James Wesley Hendrix, nominado por Trump, en un fallo de 56 páginas.
El decreto final provisional del HHS, del 30 de noviembre, decía que todos los trabajadores y algunos voluntarios y contratistas deben aplicarse la vacuna contra el COVID-19 y que todos los voluntarios y trabajadores, y los niños de 2 años en adelante, deben usar mascarillas. Se estableció el 31 de enero de 2022 como fecha límite para cumplir con la vacunación, mientras que la parte relativa al uso de mascarillas entró en vigencia de inmediato.
La agencia dijo que se le otorgó la autoridad para implementar tales reglas en la Ley Head Start, citando específicamente cómo la ley permite que la secretaría de salud “modifique, según sea necesario, los estándares de desempeño del programa por medio de la regulación aplicable a las agencias y programas Head Start bajo este subcapítulo, incluyendo (C) normas de gestión administrativa y financiera; (D) normas relacionadas con la condición y ubicación de las instalaciones (incluyendo normas de evaluación de la calidad del aire interior, cuando corresponda) … [y] (E) otras normas que el Secretario considere apropiadas».
Pero el estado de Texas argumentó en su escrito ante el tribunal, en apoyo de una solicitud de orden judicial preliminar, que los estándares claramente no incluyen órdenes de vacunación o de uso de mascarillas.
La ley “no autoriza a los acusados a exigir un tratamiento médico permanente invasivo ni las órdenes de uso de mascarillas para los niños, el personal, los contratistas y los voluntarios del programa Head Start”, dijeron los abogados de Texas. «En particular, no se menciona en absoluto la vacunación o los requisitos de uso de mascarillas».
Head Start es un programa de subvenciones federales que tiene como objetivo ayudar a los niños pequeños de hogares pobres a prepararse para la escuela. Aproximadamente 864,289 niños están inscritos en Head Start.
Los abogados de la administración Biden dijeron en una moción de oposición, a principios de esta semana, que es posible que el Congreso no haya mencionado la vacunación o el uso de mascarillas, pero dijo que el secretario de salud puede implementar estándares relacionados con la salud.
Hendrix no estuvo de acuerdo, poniéndose del lado de Texas.
El juez hizo referencia a cómo los abogados del gobierno admitieron durante una audiencia reciente que las órdenes de vacunación y de uso de mascarillas no son “servicios de salud” y que Head Start nunca había ordenado un procedimiento médico como condición previa para los trabajadores actuales o potenciales.
“La corte determina que los demandantes han demostrado una probabilidad sustancial de éxito en su reclamo de que el secretario emitió la regla sin autorización legal”, dijo Hendrix.
“El Congreso podría haber hablado directamente sobre el tema de la vacunación, el uso de mascarillas u otras precauciones en el último año al aprobar otra legislación relacionada con el COVID-19, pero no lo hizo ni la tiene”, agregó.
Una orden judicial preliminar significa que la norma está bloqueada en Texas mientras el caso avanza.
Texas originalmente solicitó una orden judicial a nivel nacional, pero los abogados del estado aclararon en la audiencia que la mayoría de las pruebas ante la corte se referían al efecto de los mandatos en Texas, y el juez decidió restringir el bloqueo al estado.
Otros veinticuatro estados también demandaron por los mandatos, pero ese caso aún no se ha resuelto.
Los abogados de la administración Biden no respondieron a una solicitud de comentarios.
El fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton, dijo en una declaración en Twitter: «Acabo de detener otra orden federal ilegal de vacunación y uso de mascarillas».
Gracias a la demanda, al presidente “se le prohibió usar del Programa Head Start para forzar la vacunación y el uso de mascarillas en [Texas], de los cuales, ¡esta administración admitió vergonzosamente que ninguno de los dos detienen el covid, de todos modos!”, añadió.
El COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
La eficacia de las vacunas contra la infección por el virus CCP disminuye con el tiempo, según muestran estudios y datos del mundo real. Contra la variante ómicron del virus, la protección es tan baja que no se considera lo suficientemente alta para una vacuna viable, según los estándares de la Organización Mundial de la Salud.
Los funcionarios federales recomiendan el uso de mascarillas para frenar la transmisión del virus, aunque los expertos están divididos sobre si las mascarillas, en particular las de tela, tienen algún efecto real para reducir la propagación de la enfermedad.
“Texas acaba de vencer a Biden de nuevo. Otra de las órdenes de vacunación y uso de mascarillas de Biden fue detenida por un juez federal en Texas”, escribió en Twitter el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott.
“La Corte escribe: ‘Es indiscutible que una agencia no puede actuar sin la autorización del Congreso’. Eso se aplicaría a todas las órdenes de Biden”, dijo.
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