La primera dama Melania Trump y la campaña del candidato presidencial demócrata Joe Biden denunciaron el martes la violencia y la destrucción que se está produciendo en Kenosha, Wisconsin.
Trump, en su discurso ante la Convención Nacional Republicana, pidió a los estadounidenses «que se tomen un momento, se detengan y miren las cosas desde todas las perspectivas».
«Insto a la gente a unirse de manera civilizada, para que podamos trabajar y vivir de acuerdo con nuestros ideales estadounidenses. También pido a la gente que detenga la violencia y los saqueos que se hacen en nombre de la justicia, y que nunca hagan suposiciones basadas en el color de la piel de una persona», dijo.
«En lugar de derribar las cosas, reflexionemos sobre nuestros errores. Estén orgullosos de nuestra historia y miren el camino que nos queda por delante. Recordemos todos los días que somos una nación bajo Dios, y que necesitamos apreciarnos unos a otros».
Trump dijo que ha reflexionado sobre los disturbios en el país.
«Es una dura realidad que no podamos enorgullecernos de algunas partes de nuestra historia. Animo a la gente a centrarse en nuestro futuro mientras aprenden de nuestro pasado. Debemos recordar que hoy en día todos somos una comunidad compuesta por muchas razas, religiones y etnias. Nuestra historia diversa e histórica es lo que hace fuerte a nuestro país y, sin embargo, todavía tenemos mucho que aprender unos de otros», dijo.
Los alborotadores han quemado edificios y saqueado negocios en Kenosha durante varias noches, aparentemente en nombre de la justicia racial. Dos personas murieron a tiros durante los disturbios.
El presidente Donald Trump, que ganó por poco Wisconsin en 2016, no mencionó los disturbios durante su discurso del martes.
En Twitter, instó a la gobernadora de Oregon, Kate Brown, a desplegar a la Guardia Nacional para ayudar a sofocar los disturbios en Portland, que han continuado prácticamente todas las noches desde finales de mayo. Brown dijo que no lo haría.
Biden, el candidato demócrata, no ha condenado personalmente los disturbios en Kenosha o Portland, pero la asesora de campaña Symone Sanders sí lo hizo.
«Como dijo Joe Biden después del horrible asesinato de George Floyd: Protestar por tal brutalidad es correcto y necesario. Es una respuesta totalmente estadounidense. Pero quemar comunidades y la destrucción innecesaria no lo son. La violencia que pone en peligro vidas tampoco, o la violencia que destruye y cierra los negocios que sirven a la comunidad», dijo Sanders en una declaración enviada a varios medios.
En junio, Biden habló sobre Floyd, que murió bajo custodia policial en Minneapolis el Día de la Recordación. Los cuatro policías involucrados fueron despedidos y se enfrentan a cargos de homicidio o de ayuda e incitación al homicidio.
«El país está pidiendo a gritos liderazgo. Liderazgo que pueda unirnos. Liderazgo que pueda unificarnos. Liderazgo que pueda reconocer el dolor y la profunda pena de las comunidades que han tenido una rodilla en el cuello durante demasiado tiempo», dijo Biden en ese momento.
«Pero no hay lugar para la violencia. No hay lugar para el saqueo o la destrucción de propiedades o la quema de iglesias, o la destrucción de negocios, muchos de ellos creados por personas de color que por primera vez estaban empezando a realizar sus sueños y a generar riqueza para sus familias. Tampoco es aceptable que nuestra policía —que juró proteger y servir a todas las personas— intensifique las tensiones o recurra a la violencia excesiva. Debemos distinguir entre la protesta pacífica legítima y la destrucción violenta oportunista».
En una declaración emitida después de que dispararan a Jacob Blake en Kenosha el domingo, Biden dijo que estaba claro que Blake «es una víctima de la fuerza excesiva» y pidió una investigación inmediata sobre el asunto.
El Departamento de Justicia de Wisconsin ya había dicho que estaba investigando el tiroteo. Los policías involucrados fueron puestos bajo licencia administrativa.
Trump fue informado sobre el tiroteo el lunes por el fiscal general William Barr, según dijo un funcionario de la Casa Blanca.
El jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, dijo a los reporteros en Washington que «es demasiado pronto para decir qué pasó realmente en base a lo que me informaron».
«Obviamente el video cuenta una historia que es preocupante», dijo.
Un clip inicial mostraba a Blake alejándose de los policías y metiéndose en un vehículo antes de recibir múltiples disparos.
Otro video publicado más tarde mostraba a Blake luchando con varios agentes en el suelo detrás del vehículo antes de escapar y caminar hacia el todoterreno.
Los agentes de policía estaban respondiendo a una llamada por un incidente doméstico. Los abogados de Blake dicen que él estaba tratando de resolver dicho incidente. Una denuncia penal presentada contra el hombre el mes pasado lo acusó de agresión sexual, allanamiento de morada y alteración del orden público. La presunta víctima del caso dijo que Blake era su exnovio y que tienen tres hijos en común.
Blake está paralizado de cintura para abajo, dijo su familia el martes. Un portavoz del Hospital Froedtert en Milwaukee, donde Blake está siendo tratado, se negó a dar detalles cuando fue contactado por The Epoch Times.
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