Los miembros del Freedom Caucus Republicano dijeron que se oponen a la ley de igualdad de los demócratas porque la legislación va en contra de las libertades señaladas en la Constitución de Estados Unidos y le daría al gobierno federal el poder de dictar cómo piensan y actúan los estadounidenses con respecto al género y el sexo, infringiendo los derechos religiosos de los ciudadanos.
«Este organismo dirigido por los demócratas está pisoteando los derechos del pueblo estadounidense en nombre de la igualdad, en el falso nombre de la igualdad», dijo el jueves el representante Chip Roy (R-Texas) en una conferencia de prensa del Freedom Caucus.
Freedom Caucus es un grupo de representantes conservadores que dicen apoyar «un gobierno abierto, responsable y limitado, la Constitución y el estado de derecho, y las políticas que promueven la libertad, la seguridad y la prosperidad de todos los estadounidenses”.
La Ley de Igualdad 2021 prohíbe la discriminación por identidad de género u orientación sexual. Los demócratas de la Cámara de Representantes aprobaron el proyecto de ley el jueves por la tarde por un estrecho margen de 224 a 206, con el apoyo de tres republicanos. Ahora la legislación se dirige al Senado.
Por su parte los demócratas apoyan el proyecto de ley y dicen que ya es hora de dar a la comunidad LGBTQ la igualdad de derechos en todos los ámbitos del empleo, la educación, el crédito, el servicio de jurado, la financiación federal, la vivienda y los alojamientos públicos. Los republicanos dicen que en algunas situaciones obligaría a las personas de fe a ir en contra de sus creencias y volvería a penalizar a las personas que piensan de manera diferente sobre el género y el sexo.
«Esto no es una sociedad libre. Esto es un gobierno que está usando su poder para decirnos que nos dobleguemos a la voluntad de una élite cultural en esta ciudad que quiere decirnos lo que se supone que debemos creer», dijo Roy. «Los dos, [mi esposa y yo] nos dedicamos a escarbar, buscar, y ahorrar para pagar a nuestros hijos para que vayan a una escuela cristiana privada. ¿Por qué? Porque nos arrinconan a una esquina para que llevemos a cabo nuestras creencias sin que nos penalicen».
«Nuestro sistema federalista nos permite estar de acuerdo con el desacuerdo y deberíamos poder hacerlo. Pero si este congreso demócrata y si el liderazgo demócrata y si esta Casa Blanca siguen pisoteando los derechos del pueblo de Estados Unidos, entonces son ellos los que estarán destruyendo esta unión», añadió.
Los conservadores dicen que la ley de igualdad, en su forma actual, corre el riesgo de pisotear la libertad religiosa y de obligar a todos los ciudadanos a estar de acuerdo con la ideología impuesta por el gobierno en materia de sexualidad o ser castigados por la ley. Los miembros del Freedom Caucus dicen que se opondrán a la legislación.
«Nosotros nos vamos a oponer a este proyecto de ley. Vamos a luchar contra este proyecto de ley en el Senado», dijo Roy. «Así mismo dejó perfectamente claro que si se aprueba esta legislación, no es con el consentimiento de los gobernados».
Los republicanos criticaron a los demócratas por considerar que el proyecto de ley se salta el proceso de los comités y pasa directamente a votación.
Por su parte, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif), dijo que los demócratas trabajarán para convertir el proyecto en ley lo antes posible.
«La Cámara de Representantes demócrata aprobará rápidamente esta legislación histórica y seguirá trabajando hasta que se convierta finalmente en ley, para que podamos combatir la discriminación anti-LGBTQ que socava nuestra democracia y hacer avanzar la justicia en Estados Unidos», dijo Pelosi en una declaración escrita.
El presidente Joe Biden elogió la ley de igualdad en una declaración escrita el 19 de febrero después de que fuera presentada por el representante David N. Cicilline (D-R.I.) y el senador Jeff Merkley (D-Ore.).
“Aplaudo al congresista David Cicilline y a todo el Caucus de Igualdad del Congreso por presentar ayer la ley de igualdad en la Cámara de Representantes, e insto al Congreso a que apruebe rápidamente esta legislación histórica”, dijo Biden en ese momento.
Se espera que el proyecto de ley tenga más dificultades para ser aprobado en el Senado, que está estrechamente unido. Los demócratas necesitarán el apoyo de 10 republicanos para alcanzar el umbral de 60 votos necesario para romper un filibusterismo.
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