Las representantes María Elvira Salazar y Hillary Scholten pidieron este jueves unión bipartidista para resolver la crisis migratoria. Ambas son patrocinadoras del proyecto Ley Dignidad que busca una solución al creciente flujo de migrantes que entran al país.
En entrevista con el programa «Common Ground» de Fox News, María Elvira Salazar (R-FL) y Hillary Scholten (D-MI) compartieron sus esfuerzos para solucionar el «sistema de migración roto» a través del proyecto «Ley Dignidad» e instaron al Congreso a respaldar su iniciativa.
Salazar señaló que como representante de «la minoría más grande en el país, lo que está pasando en la frontera es lo peor que le podría pasar» a su comunidad que no quiere a esas personas.
«Republicanos y demócratas deben enfrentar la realidad: hay una crisis en la frontera sur, los hispanos quieren ley y orden en materia de inmigración y la solución debe ser bipartidista», remarcó más tarde la congresista en un posteo de su entrevista.
Por su parte, Scholten remarcó que los demócratas de su partido deben darse cuenta de la magnitud de la crisis para abordar el problema y «la única manera de hacerlo es mediante un camino bipartidista».
«Realmente creo que los demócratas deben reconocer el hecho de que la inmigración se encuentra en un nivel de crisis en este país. Es una crisis económica, es una crisis humanitaria. Es una emergencia de seguridad nacional y debemos abordarla como tal», señaló la representante de Michigan.
Un informe reciente del Comité Judicial de la Cámara reveló que la Administración Biden no logró expulsar, a través de los procedimientos de deportación, a cerca del 99.7 por ciento de los 3.3 millones de inmigrantes ilegales encontrados y liberados en las comunidades estadounidenses.
El informe también señala que el número real de inmigrantes ilegales sin salida confirmada del país es ciertamente mayor, ya que los 3.1 millones no incluyen los 1.7 millones de “fugados” estimados, ni incluyen las liberaciones de los encuentros entre octubre y diciembre del año pasado, que el informe estima en unos 386,500.
Para Salazar, el problema con la liberación de estos migrantes es que ellos «se pierden en el país y nadie puede encontrarlos» por lo que no regresan a sus países de origen.
Por ello, su iniciativa Ley Dignidad colocaría a los inmigrantes en campus humanitarios a lo largo de la frontera para decidir si son elegibles para pedir asilo o deben ser expulsados.
«Los pondríamos allí de manera humanitaria durante 60 días, y en 60 días les diremos si realmente tienen el derecho de pedir asilo o si les vamos a dar asilo o tienen que volver a casa, nadie se va a perder en el país», sentenció Salazar.
La iniciativa, presentada en mayo pasado, propone cuatro principios: detener la inmigración ilegal, dar soluciones a los inmigrantes indocumentados que viven en Estados Unidos, fortalecer la fuerza laboral, y garantizar la prosperidad y competitividad de Estados Unidos.
Scholten remarcó que hasta ahora es el único proyecto de ley bipartidista sobre inmigración propuesto por el Congreso en «décadas».
«Reconocemos que este no es un proyecto de ley perfecto. Pero es un proyecto de ley realmente bueno que resuelve el meollo de los problemas que enfrenta nuestro país en lo que respecta a esta inmigración», señaló la demócrata de Michigan.
Con información de Alicia Márquez
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