Muchas personas en Estados Unidos estarán expuestas al nuevo coronavirus, que se originó en China a finales del año pasado, dijo el lunes una alta funcionaria de salud.
«Es justo decir que, a medida que la trayectoria del brote continúa, muchas personas en Estados Unidos, en algún momento, ya sea este año o el próximo, estarán expuestas al virus», dijo a los periodistas la Dra. Nancy Messonnier, directora del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en una llamada telefónica.
«Y hay una buena posibilidad de que muchos se enfermen», agregó.
Un estudio conjunto de la Organización Mundial de la Salud y China encontró que el virus es altamente contagioso, dijo Messonnier, y agregó que «este virus es capaz de propagarse fácilmente y de forma sostenible de persona a persona, según los datos disponibles».
Los funcionarios de salud de EE.UU. esperan que la mayoría de las personas no desarrollen enfermedades graves, según el estudio conjunto. Los investigadores encontraron que aproximadamente el 80 por ciento de los pacientes experimentan una enfermedad leve a moderada. Sin embargo, a medida que el número de casos aumenta en Estados Unidos, con grupos que se propagan rápidamente en estados como Nueva York y Washington, las personas mayores y quienes tienen afecciones de salud subyacentes deben tomar medidas, señaló Messonnier.
Los grupos, o los que ya cuidan o podrían cuidar a esas personas, deben asegurarse de tener suministros como medicamentos de rutina, medicamentos para tratar la fiebre y otros síntomas del nuevo virus, y suficiente comida para permanecer en casa por un periodo de tiempo. Hacer los preparativos ayudará a esas personas a permanecer cerca de su casa si hay una transmisión generalizada en su zona.
«Hay que pensar en las precauciones personales que se pueden tomar», dijo Messonnier.
Las personas mayores y las que tienen problemas de salud como diabetes o enfermedades cardíacas también deben evitar el contacto cercano con personas enfermas, limpiarse las manos con frecuencia, tratar de no tocar las superficies frecuentemente tocadas en los lugares públicos y evitar las multitudes, especialmente en lugares poco ventilados.
Los viajeros, especialmente las personas con problemas de salud subyacentes, no deberían ir en cruceros, según aconsejó el Departamento de Estado durante el fin de semana. Y las personas mayores o aquellas que tienen condiciones subyacentes, deben evitar todos los viajes no esenciales.
El vicepresidente Mike Pence, jefe de la Fuerza de Tarea del Coronavirus, dijo a los estadounidenses la semana pasada que cualquiera que sea mayor y tenga un problema de salud subyacente grave debe «pensar cuidadosamente en viajar». El Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas, instó a la gente a pensar en «no ponerse en una situación, cualquiera que sea, que pueda aumentar el riesgo, dada su situación».
Las personas que se encuentren cuidando a ancianos o a personas con problemas de salud deben crear un plan para el caso de que se enfermen, incluyendo la identificación de otras personas que puedan intervenir para cuidarlos, dijo Messonnier a los periodistas.
Los datos de Corea del Sur muestran que nadie menor de 30 años ha muerto por el virus, que causa de la enfermedad llamada COVID-19, dijo Messonnier. Los datos de Japón muestran que nadie menor de 50 años ha muerto. La mayoría de las muertes en Estados Unidos por el nuevo virus han sido entre residentes ancianos del Centro de Cuidado de la Vida de Kirkland en el estado de Washington. Nadie menor de 50 años parece haber muerto en el país hasta ahora.
Hasta el domingo por la noche, 34 estados y el Distrito de Columbia han reportado más de 500 casos a los Centros de Control de Enfermedades, dijo Messonnier. La agencia también ha recibido informes de 19 muertes, todas menos una en Washington.
Florida anunció recientemente dos muertes. No estaba claro por qué no se están contando en el total.
El COVID-19 surgió en Wuhan, China, a finales del año pasado y se extendió a más de 100 países de todo el mundo. No hay ninguna vacuna o tratamiento probado, aunque muchos pacientes han mejorado con el descanso y la atención médica.
Los expertos recomiendan lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos o utilizar un desinfectante de manos a base de alcohol, limpiar regularmente las superficies y los objetos, y no tocarse la cara con las manos sin lavar.
Las personas que se enferman deben quedarse en casa y ponerse en contacto con su médico o con las autoridades sanitarias. Dependiendo de sus síntomas, se les puede pedir que permanezcan aisladas en casa. Si los síntomas son severos o en algunos otros casos, los pacientes serán puestos en cuarentena en los hospitales.
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