Doscientas cincuenta y tres personas murieron por el virus del PCCh en Nueva York en un día, dijo el lunes el gobernador Andrew Cuomo.
El número de muertes por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus, se elevó a 1218 en el estado, más del 45 por ciento de todas las muertes en Estados Unidos. Nueva York también representó el 46 por ciento de los casos confirmados en el país y reportó un aumento a 66,497.
«Lo que se observa es que la gente ha estado con respiradores durante un largo período de tiempo. Cuanto más tiempo se esté con un respirador, menos probable es que se salga de él», dijo Cuomo en una conferencia de prensa en el Centro Javits del municipio de Manhattan en la ciudad de Nueva York.
Más de 9500 pacientes con COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo virus, están hospitalizados en Nueva York, con 2352 en unidades de cuidados intensivos, donde muchos están con respiradores.
Mientras que los casos, muertes y hospitalizaciones en Nueva York continúan aumentando, la tasa de aumento del número de casos se ha reducido, según las autoridades. Los casos se duplicaban cada dos días a principios de mes, pero ahora se están duplicando cada seis días.
Los nuevos casos están relacionados con personas que ignoran la orden de permanecer en casa, excepto para realizar desplazamientos esenciales, y que se reúnen en parques para jugar al baloncesto, afirmó Cuomo, amenazando con cerrar los parques si la gente no acata la orden.
El alcalde Bill de Blasio dijo el domingo que las personas que violen las reglas de distanciamiento social serán multadas entre 250 y 500 dólares y también les amenazó con cerrar los parques.
La gente puede salir, pero debe mantener aproximadamente 2 metros de distancia entre uno y los demás.
«No quiero multar a la gente cuando tantas personas están pasando por dificultades económicas, pero si no han entendido el mensaje a estas alturas y no lo hacen cuando un oficial de la policía los mira a la cara diciendo: ‘No quiero multarlos, pero si no cambian lo que están haciendo, voy a tener que hacerlo’, bueno, esa persona entonces se merece la multa», dijo de Blasio a los periodistas.
La afluencia de pacientes en algunas partes de la ciudad de Nueva York, que tiene el grueso de los casos y muertes en el estado, ha sobrecargado los hospitales y ha provocado una serie de movimientos, incluyendo la transformación del Javits Center en un hospital para atender a los pacientes que no son de COVID-19.
El USNS Comfort, un barco hospital de la Marina de Estados Unidos que alguna vez ayudó después del 11 de septiembre, llegó a Manhattan el lunes temprano, mientras los trabajadores estaban preparando la apertura de un hospital de emergencia en el Central Park. Los edificios de otros distritos se estaban cambiando a otros sitios temporales, incluyendo el Aqueduct Racetrack en Queens y el campus de la Universidad de la Ciudad de Nueva York en Staten Island.
Quinientas enfermeras y personal capacitado se añadieron para ayudar a reforzar al personal médico, dijo de Blasio el domingo, mientras que otros 500 ya estaban en camino.
«Esto ayudará a aliviar parte de la enorme presión a la que se ha visto sometido el personal de nuestro sistema de salud pública en las últimas dos semanas», dijo.
Los hospitales que empiecen a estar saturados deberían transferir a los pacientes a otros hospitales, dijo Cuomo a los reporteros. Si un hospital entero está siendo sobrecargado, el centro debería enviar a los pacientes a otro hospital, dijo.
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