Las autoridades chinas impusieron un confinamiento extremadamente estricto cuando la mayoría de los pacientes con COVID-19 tenían síntomas leves o ningún síntoma, pero de repente eliminaron todas las restricciones cuando la pandemia pasó a una fase grave de rápido crecimiento.
Los hospitales en grandes ciudades como Beijing y Wuhan se han llenado. Lo que los chinos llaman síndrome del “pulmón blanco” se ha observado en un gran número de personas infectadas.
Se están haciendo preguntas sobre si se trata de una nueva variante de COVID-19, si está regresando la cepa original o si es algo más.
“Pulmón blanco”
“Pulmón blanco” se ha convertido recientemente en la frase más buscada en Internet en China y muchas imágenes de TAC, que muestran “pulmones blancos”, están circulando en las redes sociales de la nación.
El síndrome del pulmón blanco se refiere a que los alvéolos de los pulmones se llenan de células exudativas o inflamatorias que bloquean el paso de los rayos de una tomografía computarizada o una radiografía y, por lo tanto, aparecen como áreas blancas, explicó el Dr. Dong Yuhong, director científico y cofundador de una empresa suiza de biotecnología y antiguo experto científico médico senior para el desarrollo de fármacos antivirales en Novartis Pharma, en Suiza.
Fan Deng, expresentador de la CCTV, habló sobre el caso de su padre en las redes sociales. Antes de que llevaran a su padre al hospital, todo parecía normal: Sin fiebre, sin dolor, y su apetito también era bueno. “Estaba un poco somnoliento”, dijo Fan. Fue porque Fan notó que el nivel de oxígeno en la sangre de su padre era solo del 88 por ciento, inferior al rango normal de 95 a 100 por ciento, que decidió llevar a su padre al hospital el 20 de diciembre.
Una tomografía computarizada reveló que el padre de Fan tenía una “gran región blanca” en los pulmones, lo que indica un caso grave de neumonía. Tres días después, Fan les dijo a sus amigos en WeChat que su padre había fallecido.
Lin Bin (seudónimo), una residente de Beijing, le dijo a The Epoch Times el 30 de diciembre que muchas personas mayores que desarrollaron “pulmones blancos” no tenían síntomas en las primeras etapas de la enfermedad.
Unos días antes, había llevado a su padre al Hospital 301 de Beijing para que le trataran una neumonía debida al COVID-19. Dijo que se había quedado impactada al entrar en el hospital.
“El Hospital 301 de Beijing ahora está superpoblado. La sala de emergencias y la unidad de cuidados intensivos (UCI) están llenas, y en los pasillos se pueden ver bolsas amarillas de cadáveres. Todas las camas de hospital en todos los departamentos ahora se están utilizando para recibir pacientes con infecciones pulmonares, y una gran cantidad de personas mayores han desarrollado pulmones blancos. Algunos de los ancianos que habían contraído la enfermedad casi no tenían síntomas al principio, pero luego se sintieron somnolientos y fueron enviados al hospital para ser examinados. Se descubrió que ya habían desarrollado pulmones blancos para entonces”, dijo Lin.
El “pulmón blanco” no es exclusivo de los ancianos. Muchos casos compartidos en las redes sociales chinas revelaron que algunos jóvenes de 20, 30 y 40 años también desarrollaron el síntoma.
Un bloguero de redes sociales en Chongqing le dijo a The Epoch Times el 30 de diciembre que un amigo suyo también desarrolló pulmón blanco durante una infección por COVID-19. “El síntoma en la etapa inicial fue leve, y fue después de que dio negativo que contrajo una infección pulmonar. El caso es que no tenía fiebre, hasta la tos era muy leve”.
El medio estatal chino Global Times informó el 29 de diciembre que Zhou Zhou (un seudónimo), un niño de 12 años de Wuhan, tenía tos, pero no fue al hospital de inmediato porque sus padres estaban preocupados por la infección cruzada por otros pacientes. Su tos no se alivió tras tomar medicamentos durante una semana y comenzó a vomitar y experimentó opresión en el pecho. Luego, sus padres lo llevaron al hospital y una tomografía computarizada mostró que un lado de su pulmón se había vuelto blanco. Afortunadamente, Zhou Zhou pudo recuperarse.
El subdirector de la unidad de cuidados respiratorios del Hospital Pulmonar de Shanghai de la Universidad de Tongji, Zhang Li, le dijo The Paper, un medio establecido en Shanghai, que la tasa de mortalidad de los pacientes con pulmón blanco grave supera el 40 por ciento.
¿Una cepa mutada o la reaparición del tipo salvaje?
El fenómeno del pulmón blanco ha dado lugar a varias especulaciones sobre las cepas del virus que lo está causando.
En los primeros meses del brote de COVID-19 en Wuhan, en 2020, los usuarios de las redes sociales comentaron sobre las infecciones de «pulmón blanco» en esa ciudad. Por lo tanto, algunas personas en China han preguntado si ha reaparecido la cepa original.
Bajo presión pública, Jiao Yahui, director general del Departamento Médico de la Comisión Nacional de Salud, dijo en una conferencia de prensa el 27 de diciembre que la aparición del pulmón blanco no tiene nada que ver con la cepa original en Wuhan o la vacunación, y que la cepa en China sigue siendo ómicron. El mismo día, los funcionarios locales de Beijing y Wuhan también negaron que la cepa original reapareciera entre los pacientes chinos.
Sin embargo, dadas las mentiras y la falta de credibilidad del PCCh, la mayoría de los usuarios de las redes sociales expresaron su desconfianza hacia estas declaraciones oficiales.
Preocupaciones sobre las variantes más mortales
Debido a la enorme población de personas recién infectadas en China y los informes de pacientes gravemente enfermos, que abruman los hospitales chinos, muchos científicos han expresado su preocupación sobre la posibilidad de que una variante maligna del virus resurja en China.
“Ciertamente, se desarrollarán más subvariantes de ómicron en China en los próximos días, semanas y meses, pero lo que el mundo debe anticipar para reconocerlo temprano y tomar medidas rápidas es una variante de preocupación completamente nueva”, le dijo a Bloomberg Daniel Lucey, miembro de la Sociedad de Enfermedades Infecciosas de América y profesor de la Escuela de Medicina Geisel de la Universidad de Dartmouth. “Podría ser más contagiosa, más mortal o eludir los fármacos, las vacunas y la detección de los diagnósticos existentes”.
El Dr. Stuart Campbell Ray, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad Johns Hopkins, le dijo a The Associated Press que, debido a la gran población de China y su inmunidad limitada, la combinación de los dos factores “parece ser el escenario en el que podemos ver una explosión de una nueva variante”. Ray comparó el virus con un boxeador que “aprende a evadir las habilidades que tienes y se adapta para sortearlas”.
Muchos países han reintroducido los requisitos de prueba de COVID-19 para todos los viajeros que llegan de China, incluidos Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Italia, Japón, Corea del Sur, India y Taiwán.
Corea del Norte, el «hermano pequeño» de la China comunista, ha ido un paso más allá, declarando en el sitio web de la Administración Nacional de Inmigración de China que «los ciudadanos chinos tienen prohibida la entrada temporalmente», y que todos aquellos que visitaron China recientemente, incluidos los ciudadanos norcoreanos, deben ser sometidos a 30 días de cuarentena y observación.
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