Agentes de la Patrulla Fronteriza de Texas descubrieron la semana pasada a 16 inmigrantes ilegales en la habitación de un hotel que decían estar esperando a ser introducidos de nuevo en Estados Unidos.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de EE. UU. dijo que los agentes de la Patrulla Fronteriza del Sector del Valle del Río Grande (RGV) recibieron un aviso el 17 de septiembre de que un hotel en Edinburg estaba siendo utilizado para albergar inmigrantes ilegales.
Los agentes acudieron al lugar aproximadamente a la 1 de la tarde y encontraron a dos personas que entraban en la habitación llevando agua y comestibles. Después de seguir vigilando a los dos individuos, la oficina del sheriff del Condado de Hidalgo realizó una comprobación de bienestar.
Los agentes encontraron a más de 10 personas en la habitación, 10 de las cuales eran de Honduras, cinco de El Salvador y una de México.
Los inmigrantes ilegales dijeron a los agentes que llevaban casi 30 días esperando a ser transportados a Estados Unidos.
A la mañana siguiente, agentes de la Patrulla Fronteriza de McAllen, en Hidalgo, descubrieron a varios inmigrantes ilegales más que utilizaban una alcantarilla para entrar ilegalmente en Estados Unidos.
Los agentes de McAllen y los agentes del Departamento de Policía de Hidalgo detuvieron a tres personas que salieron del desagüe, así como a otros tres inmigrantes una hora más tarde, entre ellos un niño no acompañado. Todos los inmigrantes son ciudadanos de Honduras y México.
Horas más tarde, ese mismo día, se observó a varias personas más utilizando el desagüe pluvial para entrar en Estados Unidos, y en dos horas los agentes habían detenido a otras cuatro personas que también son ciudadanos de México y Honduras.
Todos los inmigrantes ilegales que fueron detenidos en la habitación del hotel y utilizando el desagüe pluvial están siendo procesados como corresponde, dijo la CBP.
Situada justo al norte de México, la ciudad de Hidalgo está a unas 20 millas al sur de Edinburg y cerca de la frontera entre EE. UU. y México.
El arresto de estos inmigrantes ilegales se produjo cuando más de 10,000 inmigrantes ilegales se acumularon en Del Río (Texas), a unas 60 millas al noroeste de Piedras Negras y Eagle Pass, en los últimos días. La mayoría de ellos proceden de Haití y han dejado abrumados a los agentes de la Patrulla Fronteriza.
Las autoridades fronterizas de EE. UU. han expulsado a más de 6500 de la zona. Otros se han trasladado al otro lado del río Grande, a Acuña, donde decidirán qué hacer a continuación.
Durante el fin de semana, las autoridades mexicanas también acordaron que todos los autobuses extranjeros que lleven migrantes serán devueltos si intentan dirigirse a Piedras Negras o Acuña, dijo el alcalde de Piedras Negras, Claudio Bres, en una conferencia de prensa el domingo. Se están imponiendo multas de 500 a 1000 dólares a cualquiera que intente ayudar a los migrantes.
Charlotte Cuthbertson y Zachary Stieber contribuyeron a la elaboración de este artículo.
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