Los precios del petróleo cayeron el lunes, ampliando las pérdidas después de que Arabia Saudita, el mayor exportador de petróleo del mundo, recortara los precios de los contratos de crudo para Asia durante el fin de semana, reflejando la buena oferta de los mercados mundiales y la preocupación por las perspectivas de la demanda.
Los futuros del crudo Brent cayeron un 0,69 por ciento a 72,11 dólares el barril a las 10:39 GMT, mientras que el crudo West Texas Intermediate de EE.UU. estaba a 68,83 dólares el barril, tras una disminución del 0,66 por ciento.
Los profundos recortes de precios se producen cuando los bloqueos en Asia para combatir la variante delta del virus del PCCh (Partido Comunista Chino) han limitado la demanda de combustible en la región. Los precios en el noroeste de Europa y en Estados Unidos se mantuvieron estables.
Aramco, el gigante petrolero Saudi de propiedad estatal, notificó a sus clientes en un comunicado el domingo que recortará los precios de venta oficiales (OSP) de octubre para todos los grados de crudo vendidos a Asia, su mayor región compradora, en al menos USD 1 por barril.
Los recortes de precios fueron mayores de lo esperado, según una encuesta de Reuters a refinerías asiáticas.
«Los precios del crudo para Asia están a la baja, ya que indican una menor demanda y un posible aumento de la oferta», dijo Virendra Chauhan, analista de Energy Aspects.
Los suministros mundiales de petróleo están aumentando a medida que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, está aumentando la producción en 400,000 barriles por día cada mes, entre agosto y diciembre.
«Dado que la OPEP+ continúa con su plan de aumentar la producción mensualmente, a pesar de que los datos débiles de China y Estados Unidos aumentan los temores de desaceleración, y Arabia Saudita busca participación de mercado en la región, es probable que el petróleo siga bajo presión», dijo Jeffrey Halley, un Analista de mercado senior para Asia Pacífico en la empresa bursátil, OANDA.
La caída de los futuros del crudo se sumó a las caídas del 3 de septiembre tras el informe de empleos en EE.UU. El informe, que muestra un crecimiento más lento de lo esperado, indica una recuperación económica irregular que podría significar una menor demanda de combustible durante la pandemia.
Un deslucido informe de nóminas no agrícolas mostró que los empleadores estadounidenses agregaron mucho menos puestos de trabajo en agosto, de lo que se esperaba. El empleo no agrícola aumentó en 235,000 en agosto, por debajo de los 1.05 millones de empleos, revisados al alza, agregados en julio y muy por debajo de las previsiones de consenso de FactSet, que eran de 750,000 nuevos empleos.
Las pérdidas se vieron limitadas por la preocupación de que el suministro de EE.UU. seguirá estando limitado a raíz del huracán Ida. La compañía de modelos de catástrofes Karen Clark & Co estima que los daños, ocasionados por el huracán, le podrían costar a las aseguradoras aproximadamente USD 18,000 millones, informó Reuters.
El gobierno de EE.UU. está liberando crudo de las reservas estratégicas de petróleo mientras se está trabajando arduamente para recuperar la producción en la costa del Golfo de EE.UU. Unos 1.7 millones de barriles de petróleo y 1990 millones de pies cúbicos de producción de gas natural permanecieron fuera de servicio, según mostraron los datos del gobierno publicados el viernes, mientras que la escasez de energía está impidiendo que algunas refinerías reanuden sus operaciones.
El huracán también llevó a las empresas de energía estadounidenses la semana pasada a reducir la operación de plataformas de petróleo y gas natural, según datos de Baker Hughes dados a conocer el viernes. El recuento de plataformas petroleras fue el que más cayó desde junio de 2020.
Con información de Reuters.
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