Los dos principales candidatos que compiten por convertirse en el 47º presidente de Estados Unidos difieren en muchas políticas—pero la transexualidad representa una de las divisiones más profundas entre el expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris.
Las personas que se identifican como transexuales representan aproximadamente el 1.6% de la población estadounidense, según datos del Pew Research Center de 2022.
Sin embargo, las cuestiones en torno a la transexualidad han evocado respuestas enérgicas entre la población en general.
Se ha debatido si los hombres que se identifican como mujeres deben participar en deportes femeninos o utilizar los vestidores y baños femeninos.
Y, en todo el país, los padres se han opuesto a que los sistemas escolares fomenten (y oculten) los deseos de sus hijos de «cambiar» de género.
Mientras la atención de los votantes se centra principalmente en la economía y la seguridad fronteriza, las cuestiones relacionadas con las personas transgénero siguen siendo una preocupación latente para algunos mientras la campaña presidencial se dirige rápidamente hacia las elecciones del 5 de noviembre.
Estos asuntos son parte de una profunda división cultural a través de las líneas políticas e ideológicas, indica un estudio de Pew en agosto sobre las opiniones de los partidarios de Trump y Harris.
Uno de los temas más polarizadores revelados en el estudio: alrededor del 92 por ciento de los partidarios de Trump dijeron que creen que el sexo de una persona está determinado al nacer; entre los partidarios de Harris ese número es del 39 por ciento.
Alrededor del 58% de los encuestados por Pew dijeron estar totalmente a favor de la segregación por sexos en el atletismo en función de la biología de los participantes, en lugar de la identidad declarada.
Opiniones de Harris
Como candidata presidencial demócrata, Harris ha restado importancia a las cuestiones transgénero a pesar de que anteriormente se describió a sí misma como una firme defensora de las personas que se identifican como transgénero.
El 16 de octubre, cuando Bret Baier de Fox News le preguntó a Harris sobre el tema de la transexualidad, ella respondió: «Cumpliré la ley».
Ella dio una respuesta similar a la NBC el 22 de octubre.
En cambio, en 2019, durante su primera campaña presidencial, dijo en una entrevista con el Fondo de Acción del Centro Nacional para la Igualdad Transgénero que proporcionar cirugía relacionada con el género es «en esencia, una cuestión de derechos civiles. Es una cuestión de justicia. Y es una cuestión de humanidad».
Harris también dijo: «El tratamiento de transición es una necesidad médica y ordenaré a todas las agencias federales responsables de brindar atención médica esencial que brinden el tratamiento de transición”.
En 2019, también dijo que está a favor de utilizar el dinero de los contribuyentes para cubrir los costos de los procedimientos de cambio de género para inmigrantes ilegales encarcelados. Ella hizo esa declaración en un cuestionario para candidatos de la ACLU, y reportado por primera vez por CNN en septiembre.
El cuestionario preguntaba si el candidato usaría la autoridad presidencial para brindar un tratamiento de «transición de género» a las personas, «incluidas las que están en prisión y en detención de inmigrantes».
Harris marcó una casilla con «sí» y luego escribió, en parte: «Apoyo las políticas que garantizan que los presos y detenidos federales puedan obtener la atención médica necesaria para la transición de género, incluida la atención quirúrgica, mientras están encarcelados o detenidos».
Dijo que ordenaría a todas las agencias federales pertinentes “brindar un tratamiento de transición”.
En la entrevista de 2019 con el Fondo de Acción del Centro Nacional para la Igualdad Transgénero, Harris dijo que utilizó el poder de su antiguo cargo como fiscal general de California para promover “la agenda” del “movimiento”. Ocupó ese cargo durante seis años, a partir de 2011.
Harris también dijo que intervino en “un caso específico” después de enterarse de que los funcionarios de la prisión estatal “estaban obstaculizando la cirugía [de cambio de género]” para los prisioneros.
Harris dijo que “trabajó entre bastidores” para ayudar a esa persona a “obtener los servicios que merecía”.
El recluso Shiloh Heavenly Quine, un hombre anteriormente conocido como Rodney James Quine que comenzó a identificarse como mujer, era un asesino convicto que cumplía cadena perpetua.
Los médicos consideraron que la cirugía de reasignación de sexo para Quine era “médicamente necesaria”, pero los funcionarios de la prisión de California se opusieron.
En 2015, Quine llegó a un acuerdo en una demanda federal contra California, lo que allanó el camino para someterse a una “cirugía de reasignación de sexo”, según consta en un expediente judicial federal. La cirugía se completó en 2017.
Después de esa batalla judicial, Harris trabajó para garantizar que el estado cambiara su política “para que cada recluso transgénero en el sistema penitenciario tuviera acceso a la atención médica que deseaba y necesitaba”, dijo en una entrevista de 2019.
Harris calificó esa nueva política de “histórica” y dijo que pensaba que podría ser la primera de su tipo en Estados Unidos.
The Epoch Times solicitó comentarios a la campaña de Harris, pero no recibió respuesta antes de su publicación.
Opiniones de Trump
Trump prometió reiteradamente «mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos», una frase que invariablemente provoca fuertes aplausos y vítores en sus mítines.
Trump ha declarado en reiteradas ocasiones que está en contra de que se enseñe a los niños en las escuelas la «locura transgénero». Trump también denuncia que las escuelas y los terapeutas «transicionan» a los niños en secreto sin el consentimiento de los padres.
Cabe destacar que en 2023, Trump denunció los procedimientos como «mutilación infantil» al enfrentarse al gobernador de Ohio, Mike DeWine, otro republicano, por el veto de este último a una ley estatal que prohíbe las cirugías transgénero para menores y las competiciones deportivas entre personas del mismo sexo.
Los legisladores posteriormente anularon el veto y la prohibición sigue vigente tras superar los recursos judiciales.
Trump quiere que se apruebe una ley federal para prohibir la “mutilación sexual infantil” en los 50 estados.
Se opone a la «atención de afirmación de género» para menores de la administración Biden-Harris, y pide que se excluya de Medicare y Medicaid a cualquier proveedor sanitario implicado en la transición de niños.
También quiere retirar la financiación federal a los distritos escolares que sugieran que los niños pueden estar «atrapados en el cuerpo equivocado».
Batalla del Título IX
La administración Biden-Harris ha implementado políticas pro-transgénero en múltiples agencias federales desde que asumió el cargo en 2021.
La administración ha trabajado para cambiar el Título IX para ampliar la protección contra la discriminación sexual a los estudiantes que se identifican como del sexo opuesto en las escuelas, lo que, entre otras cosas, permitiría a los hombres practicar deportes femeninos y utilizar baños y vestidores para mujeres.
El Título IX es parte de las Enmiendas a la Ley de Educación de 1972. La legislación prohíbe la discriminación por motivos de sexo en cualquier escuela o cualquier otro programa educativo que reciba fondos del gobierno federal. Sus primeros defensores querían que protegiera a las mujeres de la discriminación en la educación por motivos de sexo y les brindara igualdad de oportunidades.
En abril, el Departamento de Educación finalizó una norma que redefine el significado de “sexo” dentro de esa legislación para incluir la “identidad de género”. Eso significa que los hombres que se identifican como mujeres deben tener las mismas oportunidades que las mujeres. Las escuelas y universidades que no cumplan con el Título IX corren el riesgo de perder fondos federales.
Varios estados demandaron.
En junio, un juez federal bloqueó temporalmente el cambio al Título IX en seis estados: Kentucky, Indiana, Ohio, Tennessee, Virginia y Virginia Occidental. Un juez de Texas bloqueó la aplicación de la nueva norma en el estado de la Estrella Solitaria. Un juez de Luisiana detuvo su aplicación en Luisiana, Mississippi, Montana e Idaho.
Leyes estatales
En un avance significativo a principios de este mes, la Corte Suprema de Estados Unidos acordó estudiar la posibilidad de mantener una ley de Tennessee que prohíbe los procedimientos médicos y quirúrgicos relacionados con el género a los menores.
Los activistas que defienden los derechos de las personas que se identifican como transgénero se oponen firmemente a la ley, pero los fiscales generales de al menos 22 de los 50 estados del país la apoyan.
La senadora estatal de Arkansas Robin Lundstrum, una republicana que redactó la primera ley de este tipo del país, dijo que percibe una gran diferencia entre Harris y Trump en este tipo de restricciones.
«Los niños no tienen la capacidad para consentir las devastadoras consecuencias para la salud a largo plazo de la castración quirúrgica y química», dijo Lundstrum a The Epoch Times.
«Trump ayudará a detener los ataques a los niños y el chantaje emocional de sus aterrorizados padres».
Lundstrum dijo que las acciones pasadas de Harris indican un apoyo generalizado al transgenerismo.
Después de una serie de batallas legales, la ley de Arkansas de 2021 de Lundstrum sigue «estancada» en una corte de apelaciones federal, dijo. Su destino depende del fallo de la Corte Suprema sobre el caso de Tennessee.
Casi la mitad de los estados han aprobado leyes que restringen los procedimientos médicos y quirúrgicos para menores de edad, según el Movement Advancement Project (MAP), un grupo de defensa transgénero sin fines de lucro.
Esas leyes ahora se están aplicando en estados como Texas.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, anunció recientemente acciones legales contra dos médicos presuntamente involucrados en la prescripción de hormonas a menores.
Paxton acusó a un endocrinólogo pediátrico de El Paso de recetar bloqueadores de la pubertad y hormonas a más de 20 menores para tratar la disforia de género. En algunos casos, los pacientes tenían tan sólo 12 años, según la oficina de Paxton.
Paxton presentó una demanda similar contra un médico de Dallas a principios de este mes, alegando que la doctora falsificó registros para ocultar el hecho de que estaba recetando hormonas para la disforia de género. Paxton afirmó que la doctora atendió a casi dos docenas de menores.
El estado está tratando de imponer multas a ambos médicos, que podrían perder sus licencias médicas si son declarados culpables de violar la ley.
Texas aprobó el Proyecto de Ley Senatorial 14 en 2023, que prohíbe a los proveedores médicos realizar cirugías que esterilicen a los niños, como la extirpación de partes de sus sistemas reproductivos, mastectomías y la prescripción de medicamentos que inducen infertilidad temporal o permanente, como bloqueadores de la pubertad y hormonas de género cruzado.
Quince estados azules y el Distrito de Columbia han ido en la dirección opuesta y han aprobado “leyes de protección de las personas transgénero”, que protegen a los menores que buscan hacer la transición y a los médicos que les ayudan, según MAP.
Estas leyes protegen a las personas o a los médicos que se identifican como transgénero de cargos civiles o penales que surjan del estado donde están prohibidos los procedimientos médicos para la transición.
Estados como California, Colorado y Maine han aprobado una amplia legislación de protección de las personas transgénero.
California se convirtió en el primer estado del país en prohibir a los distritos escolares exigir al personal que notifique a los padres sobre el cambio de identificación de género de sus hijos, según una ley firmada en julio por el gobernador Gavin Newsom.
En la primavera, Colorado aprobó dos leyes relacionadas con las personas transgénero: el Proyecto de Ley de la Cámara de Representantes 24-1071 facilita que los convictos por delitos graves que se identifican como transgénero cambien su nombre legal, y el Proyecto de Ley de la Cámara de Representantes 24-1039 exige que los distritos escolares utilicen el nombre preferido de los estudiantes.
Además de aprobar una ley de protección para personas transgénero, Maine aprobó una ley para actualizar todos los formularios impresos que requieren que el género de una persona agregue una opción para designar «X» para el género antes del 31 de diciembre de 2024.
En 2023, el estado legalizó que los jóvenes de 16 y 17 años accedan a hormonas relacionadas con el género sin el consentimiento de los padres en algunas situaciones.
Desde 2018, los residentes de Maine han podido cambiar su género en sus licencias de conducir.
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