El régimen comunista de China está apoyando activamente a potencias autoritarias con la intención de socavar a Estados Unidos y el orden internacional que lidera, según información que se ha dado a conocer en el Congreso.
El Partido Comunista Chino (PCCh) se está alineando con otras potencias adversarias, incluidos Irán y Rusia, para desmantelar el orden internacional basado en reglas, dijo el exsecretario de Estado Mike Pompeo.
“Estos actores están trabajando para socavar las cosas que más nos importan aquí en casa”, dijo Pompeo durante una audiencia del 30 de enero ante el Comité Selecto de la Cámara de Representantes sobre el PCCh.
“Hay drones iraníes que van a Rusia para matar a niños ucranianos. Hay energía rusa fluyendo hacia China. Hay semiconductores chinos fluyendo hacia la industria de defensa rusa. Hay petróleo iraní [yendo] tanto a Rusia como a China”.
Ese creciente alineamiento, dijo Pompeo, se estaba produciendo en el marco de una estrategia más amplia del PCCh «para lograr el declive estadounidense» en todos los ámbitos.
Estados Unidos también está perdiendo su capacidad de disuadir la agresión al no responder con más fuerza a las amenazas emergentes en Ucrania, Gaza y el Estrecho de Taiwán, añadió.
“Hemos perdido la disuasión en Europa. Hemos perdido la disuasión en Medio Oriente. Estamos a punto de perder ese modelo tan disuasorio también en Asia”, dijo Pompeo.
“Este desafío no tiene ni remotamente que ver con la política. No es ni remotamente partidista. Es mucho más fundamental que eso”.
La estrategia de China para “socavar a Estados Unidos”
Los esfuerzos del PCCh por apoyar a Irán, Corea del Norte y Rusia han estado cada vez mejor documentados en los últimos años y encajan en un esfuerzo más amplio para remodelar el orden internacional.
Hay evidencia de que el PCCh está ayudando a Teherán con ayuda directa, incluso a través de acuerdos de trueque con Irán, que evitan la necesidad de transacciones monetarias sancionables. Algunas de las ganancias resultantes en Irán podrían luego canalizarse hacia las mismas organizaciones terroristas que atacan a los soldados estadounidenses en Medio Oriente.
Asimismo, Xi y el líder ruso Vladimir Putin declararon una asociación “sin límites” en 2022 y desde entonces firmaron una declaración conjunta que profundiza la “asociación estratégica integral” de las naciones.
Los líderes también se comprometieron a remodelar el orden internacional según sus intereses, y Putin dijo que China y Rusia crearían un “orden mundial multipolar” más justo para reemplazar las “reglas” del actual orden internacional.
El exsecretario de Defensa, Leon Panetta, también testificó en la audiencia, diciendo que el esfuerzo por socavar y reemplazar el orden internacional tenía como objetivo principal el desmantelamiento del poder de Estados Unidos y de sus aliados.
“Vivimos en un mundo peligroso en el que tiranos, autócratas y terroristas desafían y atacan a las democracias”, dijo Panetta.
“Es importante que nunca subestimemos a [el líder del PCCh] Xi Jinping porque aprovechará cada oportunidad para socavar a Estados Unidos y a Occidente”.
Con ese fin, Panetta dijo que una percepción de debilidad en la respuesta de Estados Unidos a las amenazas emergentes estaba fomentando una mayor agresión por parte de potencias autoritarias en todo el mundo.
«Realmente creo que China y Rusia se volvieron más agresivas porque sintieron la debilidad de Estados Unidos», dijo Panetta.
«China se está aprovechando de estos conflictos para promover sus propias narrativas sobre el declive occidental».
“Momento decisivo para la seguridad de Estados Unidos”
El presidente del Comité Selecto, Mike Gallagher (R-Wisc.), describió la alineación de los regímenes autoritarios en Beijing, Moscú, Pyongyang y Teherán como una tormenta que se avecina, para la cual la nación tendría que prepararse.
«Estamos en un momento decisivo para la seguridad de Estados Unidos y la seguridad global en general», dijo Gallagher.
“Deberíamos reflexionar sobre las lecciones de la historia… Los problemas no envejecen bien. Los ignoramos bajo nuestro propio riesgo”.
Con ese fin, Pompeo dijo que solucionar el problema no era tan simple como mejorar los vínculos económicos entre los poderes democráticos y autoritarios.
De hecho, la hostilidad del PCCh, dijo, era “ideológica” y estaba impulsada por algo “mucho más profundo y oscuro”.
“Xi Jinping está impulsado por la ideología marxista-leninista… La economía es una herramienta mediante la cual busca la hegemonía global”, dijo Pompeo.
“Este no es un esfuerzo por mejorar la vida del pueblo chino. Este es un esfuerzo por agregar poder para el Partido Comunista Chino”.
Como tal, dijo, Estados Unidos necesitaría mantener al PCCh “en riesgo” para disuadir adecuadamente un conflicto futuro, incluida una invasión a Taiwán.
Panetta, igualmente, dijo que Estados Unidos necesitaría incrementar sus esfuerzos para construir alianzas en el extranjero y demostrar fuerza cuando sea necesario.
“La única manera de tratar con China es desde la fuerza”, afirmó Panetta.
«Si no somos líderes, entonces gobernaremos desde la crisis «.
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