La política exterior de la administración Trump se centra en la seguridad nacional de EE.UU., la libertad religiosa y es «100 por ciento pro-vida», dijo el Secretario de Estado Mike Pompeo durante un discurso pronunciado en The Family Leader Summit celebrada el viernes en West Des Moines, Iowa.
«Nuestros fundadores construyeron nuestro país sobre un compromiso con los derechos fundamentales, derechos inalienables… que provienen de estos increíbles documentos, nuestra Declaración de Independencia y nuestra Constitución, y la política exterior de nuestra nación debe basarse en esos entendimientos centrales», dijo Pompeo.
Seguridad nacional
La seguridad nacional es «el primer deber de cualquier gobierno» como lo entendieron los Padres Fundadores y también es «la máxima prioridad de cualquier Secretario de Estado, y ciertamente también para el presidente [Donald] Trump», dijo Pompeo, y agregó: «Ojalá algunos alcaldes de todo Estados Unidos supieran eso también».
Las principales amenazas para la seguridad nacional que enfrenta EE.UU. hoy en día son China «que trabaja para derribar la libertad en todo el mundo», Rusia que intenta «envenenar nuestra democracia, nuestras instituciones» utilizando la desinformación «para sembrar la discordia» en EE.UU., e Irán con su «deseo de difundir la Revolución Islámica en todo el Medio Oriente», dijo Pompeo.
Las administraciones anteriores subestimaron la amenaza real que representaba el Partido Comunista Chino (PCCh), dijo Pompeo, y agregó que durante muchos años los pensadores de política exterior han creído que «cuanto más comerciáramos con China, más libre se volvería esa nación y menos riesgo correría el pueblo estadounidense».
Sin embargo, la política exterior basada en esta suposición fracasó, con las continuas amenazas del PCCh hacia Taiwán, socavando la libertad a Hong Kong y las continuas violaciones graves de los derechos humanos de su pueblo, dijo Pompeo.
La administración Trump reconoció el hecho de que las políticas del PCCh ponen en riesgo a los estadounidenses, dijo Pompeo, y tomó medidas para contrarrestar sus esfuerzos por «aplastar la libertad del mundo».
Ejemplos de esta acción contraria son la imposición de sanciones y restricciones de viaje a los funcionarios del PCCh, la oposición a la propaganda del régimen sobre el encubrimiento del virus del PCCh, que surgió por primera vez en la ciudad central china de Wuhan, y la revisión de los acuerdos con Hong Kong, dijo Pompeo.
La administración también está trabajando para poner fin al robo de la propiedad intelectual estadounidense por parte de China y hacer mejores acuerdos comerciales con China, como se estipula en la Fase 1 del acuerdo comercial entre EE.UU. y China.
La política sobre Irán también ha cambiado fundamentalmente, dijo Pompeo. Estados Unidos se retiró del acuerdo nuclear con Irán firmado por la administración anterior, que proporcionó dinero al régimen iraní para seguir financiando al terrorismo, lo cual representaba un riesgo para Estados Unidos y la región de Oriente Medio, dijo.
La «nueva política de Irán» implentada por la administración Trump priva al régimen iraní de «dinero manchado de sangre», «santuario diplomático» y «disuade al régimen de la agresión», añadió.
Defendiendo de la libertad religiosa
Pompeo dijo que estaba orgulloso del trabajo que la administración ha hecho para defender la libertad religiosa.
Hoy en día, «cuatro de cada cinco personas en todo el mundo no disfrutan de plena libertad religiosa», dijo Pompeo.
El Departamento de Estado instituyó la Reunión Ministerial de 2018 para Promover la Libertad Religiosa, donde los líderes políticos y religiosos mundiales se reúnen para discutir los desafíos que enfrentan los creyentes religiosos, idear formas de combatir la persecución y la discriminación religiosa, y aumentar el respeto por la libertad de religión o creencia, según una declaración del Departamento de Estado.
El año pasado la Reunión Ministerial fue «la conferencia de derechos humanos más grande jamás realizaa en el Departamento de Estado», dijo Pompeo.
El Departamento de Estado también ha establecido programas de capacitación sobre libertad religiosa para los oficiales del servicio exterior, agregó.
La administración criticó especialmente «la guerra de China contra la fe», dijo Pompeo. El año pasado en agosto, el vicepresidente Mike Pence se reunió con representantes de tres grupos religiosos perseguidos en China—cristianos, practicantes de Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, uigures y musulmanes uigures—junto con otros defensores de la libertad religiosa.
El presidente Donald Trump y el embajador general de Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional, Sam Brownback, se reunieron con supervivientes de la persecución religiosa de diferentes religiones de 17 países, entre ellos China, Corea del Norte, Irán, Pakistán, Birmania, Sudán y Cuba.
Trump pasó «casi media hora haciéndoles preguntas muy personales, escuchando historias de hogares quemados y de familiares encarcelados, y reafirmando el compromiso estadounidense con la libertad religiosa», dijo Pompeo.
«Esta administración aprecia y sabe que nuestros derechos provienen de Dios, no del gobierno», agregó Pompeo.
El 20 de julio, el 21º aniversario del inicio de la cruel campaña del PCCh para erradicar a Falun Dafa, Pompeo pidió «al gobierno de la RPC que ponga fin de inmediato a su abuso y maltrato depravado hacia los practicantes de Falun Gong, libere a aquellos encarcelados debido a sus creencias como Ma Zhenyu, y aborde el paradero de los practicantes desaparecidos», según un comunicado.
Ma Zhenyu es el esposo de la Dra. Yuhua Zhang, quien se unió a la Reunión Ministerial de 2019 para Promover la Libertad Religiosa y describió cómo fue encarcelada y torturada por sus creencias, recordó Pompeo en la declaración. Zhang abogó en la Reunión Ministerial por su marido quien «ha soportado el encarcelamiento y meses de tortura porque se niega a renunciar a las creencias de Falun Gong», dijo Pompeo.
«Veintiún años de persecución a los practicantes de Falun Gong es demasiado tiempo, y debe terminar», declaró Pompeo hoy.
Falun Dafa, también conocida como Falun Gong, es una disciplina espiritual que incluye ejercicios de meditación y un conjunto de enseñanzas morales basadas en los principios de verdad, benevolencia y tolerancia.
Apoyo pro-vida en la política exterior
Estados Unidos marca la pauta para el resto del mundo en lo que respecta a la defensa de los derechos de los no nacidos, dijo Pompeo, y añadió: «el aborto simplemente no es un derecho humano. Quita una vida humana».
La administración restableció la Política de la Ciudad de México para que no se use dinero de los contribuyentes estadounidenses para realizar abortos activos en ningún lugar del mundo, añadió.
Pompeo dijo que él y Alex Azar, Secretario de Salud y Servicios Humanos, movilizaron a 20 países para emitir una declaración conjunta en la ONU criticando el lenguaje pro-aborto en los documentos de la ONU, y agregó que «en muchas partes del mundo este tipo de lenguaje está prohibido».
Cumbre de Liderazgo Familiar
La esposa de Pompeo, Susan, al presentar a su esposo en la Family Leader Summit, con entradas agotadas, destacó el impacto positivo que la fe de Pompeo ha tenido en su vida y en su trabajo. Su fe resonó especialmente con aquellos líderes mundiales que son de fe, independientemente de cuál sea su religión, dijo.
Ellos sienten que comparten un vínculo común con él debido a la fe, dijo ella, añadiendo que «es un muy buen lugar para comenzar la diplomacia».
La organización cristiana The Family Leader tiene la misión de fortalecer a las familias al inspirar «el liderazgo en el hogar, en la iglesia y en el gobierno» con valores cristianos, de acuerdo con su sitio web.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
Descubra
El régimen comunista en China los mata como animales ¿Qué podemos hacer?
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.