El proyecto estadounidense para crear una coalición para contrarrestar la amenaza del Partido Comunista Chino (PCCh) está cobrando impulso a medida que más países se dan cuenta de que su seguridad y soberanía corren peligro si no se pone freno a la influencia de los regímenes autoritarios.
Estados Unidos ha hecho mucho para «demostrar al mundo la amenaza que el Partido Comunista Chino representa para ellos» y fue capaz de cambiar el rumbo, dijo el miércoles el secretario del Departamento del Estado, Mike Pompeo, en una conversación en el Club Económico de Nueva York con Marie-Josée Kravis, presidenta emérita del Club y miembro principal del Instituto Hudson.
Sin embargo, los aliados deberían hacer sus propias investigaciones y llegar a su propio entendimiento de la amenaza del PCCh en lugar de actuar porque «Estados Unidos les pidió» que lo haga, dijo Pompeo.
El Reino Unido recientemente prohibió a la empresa china de telecomunicaciones Huawei suministrar sus redes 5G y ordenó la retirada de todo el equipo existente de Huawei de la infraestructura de telecomunicaciones en el país en un plazo de siete años.
Pompeo dijo que el Reino Unido lo hizo «porque llevó a cabo un análisis exhaustivo basado en un conjunto de información», parte de la cual fue recopilada y compartida a través de la coalición de inteligencia Cinco Ojos y luego concluyó que la información privada de los británicos no debería viajar a través de redes no confiables y ser interceptada por el PCCh.
La Unión Europea ha tratado recientemente de abordar las desigualdades en su relación con China, de acuerdo con el Libro Blanco adoptado por la Comisión Europea en junio, y ha tratado de dialogar con Estados Unidos para unir sus esfuerzos en la lucha contra el tratado del PCCh.
A su vez, India ordenó a sus empresas de telecomunicaciones y proveedores de Internet que bloqueen más de 50 aplicaciones chinas tras reconocer la amenaza que suponen estas aplicaciones para la seguridad de los indios, dijo Pompeo.
Según el secretario de Estado, los empresarios estadounidenses también deberían evaluar los riesgos de operar sus negocios en Hong Kong o confiar en las cadenas de suministro en China que pueden ser «contaminadas por las violaciones de los derechos humanos».
Pompeo dijo que Estados Unidos trabaja con muchos países como Japón, Australia, Corea del Sur, India, Israel y Brasil en asuntos relacionados con China y aunque estos países tienen diferentes culturas y tradiciones, comparten los mismos objetivos de proteger a sus pueblos y llevarles prosperidad.
Estas importantes economías quieren que el PCCh siga las mismas reglas y la misma reciprocidad en la escena mundial que todos los demás, dijo Pompeo.
Fracaso de la política de diálogo a toda costa con China
La política de «compromiso diplomático y diplomacia de diálogo a toda costa» con China, iniciada por el entonces secretario de Estado, el Dr. Henry Kissinger, en la década de 1970, no logró su objetivo, dijo Pompeo.
Kissinger describió el comportamiento del régimen chino como una «agresión unilateral», proporcionando ejemplos como el notorio robo de propiedad intelectual de China, sus promesas rotas de no militarizar el mar de China Meridional, y sobre el ganar influencia sobre la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Los trabajadores de la clase media estadounidense [perdieron] sus empleos porque (…) el buen trabajo realizado por las empresas estadounidenses para crear valor real [fue] destruido por el robo chino», dijo Pompeo.
Por otro lado la OMS repitió regularmente la propaganda del PCCh durante las reuniones informativas de los reportes a pesar de la evidencia de que el régimen chino manipuló la información para ocultar los hechos relacionados con el brote epidémico del virus del PCCh, también conocido como el nuevo coronavirus, que surgió por primera vez en la ciudad central de Wuhan. Estados Unidos dejó a continuación de ser miembros de la OMS.
El 13 de julio, Estados Unidos rechazó oficialmente casi todas las principales reivindicaciones territoriales de Beijing en el mar de China Meridional.
«Todo país que tenga reclamaciones marítimas que sean legales y lícitas y que estén reconocidas por el derecho internacional debe ser apoyado por Estados Unidos», dijo Pompeo, y añadió que esta medida se tomó para apoyar a Vietnam, Malasia, Indonesia y Filipinas.
Los objetivos de la política del presidente Donald Trump hacia China son «la justicia y la reciprocidad y la seguridad para el pueblo estadounidense», dijo Pompeo, y añadió que Estados Unidos quiere que China respete el estado de derecho.
El secretario general del PCCh, Xi Jinping, ha tomado una serie de decisiones unilaterales agresivas y «ha demostrado que no está dispuesto» a cumplir estas expectativas, añadió Pompeo.
El despertar de Europa
El primer ministro polaco Mateusz Morawiecki advirtió contra los vendedores no seguros de las redes europeas 5G, en declaraciones publicadas el miércoles por The Telegraph.
Para que la tecnología 5G «nos sirva bien, su implementación debe basarse en la confianza y el control democrático», dijo Morawiecki. «No podemos permitirnos que [nuestra red 5G] caiga en manos de ciberdelincuentes patrocinados por un estado o de otra manera».
Europa debería aprender la lección de la recesión económica debida a la pandemia COVID-19 y evitar «la repetición de la dependencia económica de socios poco fiables», escribió Morawiecki.
«La pandemia nos ha hecho dolorosamente conscientes de lo crucial que es tener nuestras propias líneas de producción seguras de productos farmacéuticos, equipos médicos y laboratorios. Lo mismo ocurre con las decisiones 5G», añadió.
«Desconocer la necesidad de asegurar nuestra tecnología crítica sería un error por el que los europeos pagarían un precio considerable», añadió.
En la construcción de la infraestructura 5G, los europeos tienen la opción de elegir entre «dos proveedores europeos de confianza, ambas firmas de clase mundial con prácticas comerciales transparentes basadas en el estado de derecho» y «dos firmas controladas por un régimen autoritario», dijo Morawiecki.
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