El precio promedio de la gasolina en todo el país ha alcanzado los 5 dólares por galón por primera vez en la historia.
El precio promedio alcanzó los 5 dólares el 11 de junio, según la Asociación Americana del Automóvil (AAA), que hace un seguimiento de los precios.
El promedio llega a 6.43 dólares en algunos estados, como California, y a 4.46 dólares en otros, como Alabama.
Gas Buddy, otro rastreador de precios, dice que el promedio nacional alcanzó los 5 dólares el 9 de junio.
En cualquier caso, el precio se ha disparado desde que el presidente Joe Biden asumió el cargo en enero de 2021, y ha subido 2 dólares el galón desde hace un año y unos 20 céntimos desde hace una semana.
Los analistas afirman que el aumento de los precios se debe a factores como la disminución de la capacidad de refinado en todo el mundo, incluso en Estados Unidos, debido a la pandemia del COVID-19 y a que los países prohíben el petróleo ruso debido a la guerra entre Rusia y Ucrania.
El enfoque de la Administración Biden en la restricción de la producción nacional también ha desempeñado un papel, según algunos expertos.
«Ha sido un problema tras otro este año, y lo peor de todo es que la demanda no parece responder a la subida de los precios del gas, lo que significa que hay una alta probabilidad de que los precios puedan subir aún más en las próximas semanas», dijo Patrick De Haan, jefe de análisis de petróleo de GasBuddy, en un comunicado. «Se trata de una tormenta perfecta de factores que se alinean para crear un entorno poco habitual de subidas rápidas de precios. La situación podría empeorar aún más si se produjera algún problema inesperado en las refinerías del país o un gran huracán que afectara a la producción de petróleo o a las refinerías este verano».
Ronna McDaniel, la presidenta del Comité Nacional Republicano, señaló que en la campaña electoral, Biden prometió detener las perforaciones en tierras federales y «acabar con los combustibles fósiles». Desde que asumió el cargo, su administración ha frenado los permisos de perforación petrolera y ha promovido una rápida transición a formas alternativas de energía como la solar y la eólica.
«Biden prometió eliminar el petróleo y el gas natural, ahora las familias están pagando el precio de su agenda energética antiamericana. ¿La solución de Biden? Obligar a los estadounidenses a conducir menos o a comprar un costoso vehículo eléctrico», dijo McDaniel en un comunicado. «Biden ha perdido el contacto [con la realidad] y no tiene soluciones reales, ni un plan, ni simpatía por las familias que están teniendo problemas».
La Casa Blanca no respondió a una solicitud de comentarios.
La secretaria de Energía, Jennifer Granholm, y el secretario de Transporte, Pete Buttigieg, ambos nominados por Biden, señalaron esta semana el anuncio de la administración de que está trabajando en una norma que ayudará a construir una red de cargadores para vehículos eléctricos en todo el país.
«Para apoyar la transición a los vehículos eléctricos, debemos construir una red nacional de recarga que haga que encontrar un cargador sea tan fácil como cargar combustible en una gasolinera», dijo Buttigieg en un comunicado.
El aumento de los precios de la gasolina fue uno de los factores que más contribuyeron a un nuevo repunte de la tasa de inflación, según informó el viernes la Oficina de Estadísticas Laborales. Los costes de otros bienes, incluidos los alimentos, también han subido mucho en los últimos meses.
Biden, que se dirigió a una multitud en el puerto de Los Ángeles el viernes, culpó de las subidas de los precios al presidente ruso Vladimir Putin. Dijo que la principal prioridad económica de su administración es la lucha contra la inflación, y que los funcionarios han estado actuando para “reducir el costo de mover los productos a través de la cadena de suministro”.
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