Un terremoto en la costa de Vanuatu, de magnitud 6.1 se registró el 21 de diciembre al oeste de Por Vila, como una posible réplica del sismo de magnitid 7.3 que el 17 de diciembre provocó daños generalizados y más de una decena de muertos en la capital.
El Servicio Geofísico de Estados Unidos (USGS), registró un movimiento telúrico de magnitud 6.1 a las 15:30, hora UTC del 21 de diciembre en el mar a 39 kilómetros de profundidad. El epicentro fue a 30 kilómetros al oeste de Port Vila, la ciudad más grande de Vanuatu donde viven unas 35,000 personas. Vanuatu incluye un grupo de 80 islas con cerca de 330,000 habitantes.
No se han informado efectos inmediatos tras la réplica y el sistema de alerta de tsunami (Tsunami Warning System) de Estados Unidos, no emitió una alerta de posible maremoto en el Pacífico, de acuerdo con su página Web.
La noche del martes, según la agencia Efe, el gobierno de Vanuatu declaró el estado de emergencia hasta el 24 de diciembre, para atender el desastre ocurrido tras el terremoto de 7.3 ocurrido el 17 de diciembre a las 12:47 hora local, con el epicentro también localizado unos 30 kilómetros al oeste de Port Vila.
Al menos diez edificios de la ciudad sufrieron «daños estructurales», entre ellos los de la Embajada de EE. UU., Reino Unido y Nueva Zelanda, según la Oficina de Gestión de Desastres de Vanuatu.
El embajador de Francia en Vanuatu, Jean-Baptiste Jeangène Vilmer, escribió en Twitter sobre los efectos ocurridos en algunas embajadas. “Terremoto muy fuerte en Vanuatu, embajada destruida (partida en dos, planta baja de la embajada de Estados Unidos aplastada), personal sano y salvo pero numerosas víctimas en el país, vuelos suspendidos, comunicaciones cortadas, sin agua ni electricidad, organicemos ayuda», escribió el embajador.
Actualmente, Vanuatu aún está trabajando en recuperar la normalidad en varios servicios, como el suministro eléctrico, de agua o las comunicaciones, de acuerdo al último comunicado de la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), según la agencia Efe.
Sin embargo, el aeropuerto internacional de Vanuatu, en Port Vila, anunció este sábado que reiniciaba a partir de mañana sus vuelos comerciales tras permanecer varios días cerrado por los daños causados por el terremoto del 17 de diciembre.
«Tras una serie de consultas con todas nuestras agencias aeroportuarias, nos complace anunciar que reabriremos el Aeropuerto Internacional de Port Vila a las operaciones de aerolíneas comerciales desde el domingo», anunció el organismo regulador, según la agencia.
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