Se multiplicó por diez cruce de frontera de EE. UU. ante tendencia en redes sociales en China de «huir»

Por Jenny Li y Angela Bright
26 de febrero de 2023 3:49 PM Actualizado: 26 de febrero de 2023 3:49 PM

El cierre de Shanghai, la ciudad más grande de China, en marzo de 2022 provocó el surgimiento de “润”, que se pronuncia run, con el que los chinos intentan emigrar. En enero, el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos anunció que se había multiplicado por diez el número de chinos que cruzaban la frontera sur, lo que aumentó la preocupación por la seguridad nacional.

Tan solo en enero, 1084 ciudadanos chinos fueron detenidos en la frontera sur de EE. UU., en comparación con 89 en enero de 2022, lo que representa un aumento de 1118 por ciento, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU.

Además, los agentes de la Patrulla Fronteriza en la frontera sur de EE. UU. detuvieron a 2999 ciudadanos chinos en el período de cuatro meses de octubre de 2022 a enero de 2023, un aumento del 719 por ciento con respecto a los 366 detenidos en el mismo período de 2022 y más que los 2626 detenidos en los años fiscales 2021 y 2022 juntos.

¿A qué se debe este aumento del tráfico de chinos a través de la frontera sur de Estados Unidos?

Esta es solo un pequeño flujo en la ola de migración que ha estallado en China en los últimos años.

La política de reducción a cero COVID del PCCh impulsa la tendencia de «run»

En mayo de 2022, el carácter chino “润” apareció con frecuencia en las redes sociales chinas.

La palabra china “润”, aunque suena como la palabra inglesa “run”, en las redes sociales chinas significa huir y emigrar al extranjero.

A partir de marzo de 2022, las autoridades de Shanghai, una ciudad con muchas élites empresariales, culturales y académicas, empezaron a cerrar la ciudad y a separar a los niños de sus padres infectados con COVID-19, lo que provocó el descontento público. Los residentes que criticaron a las autoridades por Internet fueron abordados por la policía.

El cautiverio y el autoritarismo han provocado un aumento del deseo de los chinos de emigrar y un incremento de los debates en Internet sobre el tema.

Foto de la época
Agentes de policía bloquean la calle Wulumuqi en Shanghái, donde la noche anterior se celebraron protestas contra la política de reducción a cero-COVID en respuesta a un incendio mortal en Unumqi, Xinjiang, el 27 de noviembre de 2022. (Hector Retamal/AFP vía Getty Images)

“Muchos de los clientes que conozco en Shanghái ya han corrido. Aquellos que tienen los medios para huir, ya sea ellos mismos o sus hijos, lo han hecho”, dijo un internauta “Hong Buming”.

Chen Chuanchuang, un abogado chino que escapó a Nueva York en 2012, dijo que aunque el Partido Comunista Chino (PCCh) ha sido tiránico durante décadas, sigue siendo raro ver a casi todos prisioneros como lo han sido durante los últimos tres años.

«Por ejemplo, cuando había graves conflictos entre las zonas urbanas y rurales, el 20 por ciento de la población urbana seguía teniendo una [vida] mucho mejor que el otro 80 por ciento de la población rural», declaró Chen a The Epoch Times el 16 de febrero.

“Pero esta vez, ya sea que estés en la ciudad, en el campo, en Beijing, en Shanghái, en todas partes, vemos a las autoridades encerrando a la gente en sus casas como si fueran prisioneros. Así que para la gente promedio, esa experiencia personal es más inolvidable para ellos».

Según el «Índice de WeChat» proporcionado por la red social china WeChat, el 3 de abril de 2022, después del anuncio oficial del PCCh de «adherirse estrictamente a la política de reducción a ‘Cero-COVID'», el índice general de búsqueda de «inmigrantes» aumentó en un 440 %. En ese día.

Según los datos de búsqueda de palabras clave de migración publicados por Baidu para la semana del 28 de marzo al 3 de abril de 2022, la cantidad de búsquedas sobre «condiciones para emigrar a Canadá» alcanzó su punto máximo, con un aumento del 2846 % respecto al mes anterior. A esto le siguió un aumento intermensual del 2455 % en el número de búsquedas de «buenos lugares para ir al extranjero».

En el XX Congreso del PCCh, Xi Jinping inició con éxito su tercer mandato, incitando a más chinos a considerar la posibilidad de huir.

Foto de la época
El líder chino, Xi Jinping (Izq.), camina con (2° de Izq. a Der.) Li Qiang, Li Xi, Zhao Leji, Ding Xuexiang, Wang Huning y Cai Qi, miembros del nuevo Comité Permanente del Politburó del Partido Comunista Chino, el máximo órgano de decisión de la nación, mientras se reúnen con los medios de comunicación en el Gran Salón del Pueblo de Beijing, el 23 de octubre de 2022. (Wang Zhao/AFP vía Getty Images)

David Lesperance, un abogado europeo que trabajó con familias adineradas en Hong Kong y China, dijo al Financial Times que había recibido tres instrucciones de familias de empresarios chinos con un patrimonio neto muy alto para llevar a cabo sus «planes de fuga». Muchos de sus clientes pasaron años planeando su huida, trasladando dinero legalmente a jurisdicciones extraterritoriales seguras y organizando residencias en el extranjero y nuevas ciudadanías para sus familias.

Alrededor de 10,800 chinos ricos emigraron en 2022, la mayor cantidad desde 2019, según New World Wealth, un socio global de inteligencia de datos de la consultora de inversión en inmigración Henley & Partners.

Un caso de tráfico ilegal desencadena un efecto de manifestación

Hay muchas formas de que los ricos puedan emigrar, pero ¿cómo pueden escapar de China los pobres?

Un reportaje de la CNN de agosto de 2022 llamó la atención de mucha gente.

El reportaje describe cómo Wang Qun, un chino de 33 años, dejó atrás a su familia y recorrió miles de kilómetros en avión, autobús, barco y motocicleta a través de densas selvas y áridas montañas, entrando y saliendo de centros de detención, y finalmente cruzando la frontera sur de Estados Unidos.

Otro joven chino, Liu Xiang, vio el reportaje. Le aclaró al instante la hoja de ruta de China en su mente.

Liu llevaba mucho tiempo queriendo salir al extranjero.

Liu nació en Xinjiang en 1985. Fue el origen de muchos de los horrores de su vida.

Tras graduarse en la universidad, Liu se quedó en Xinjiang para trabajar. Una vez caminando por la calle, la policía lo detuvo sin motivo.

“En la actividad de revisar teléfonos en la calle, [la policía] revisó mi teléfono y descubrió que había algunas aplicaciones en mi teléfono que no estaban aprobadas por el gobierno de Xinjiang y se consideraban relativamente sensibles”, dijo Liu a The Epoch Times el 17 de febrero.

“Me dijo que me podrían enviar a un campo de reeducación por tal comportamiento, pero como no encontró muchos registros míos ‘ilegales’, me dejó ir. Sin embargo, dijo que si volvía a encontrar algo así, me enviaría».

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Una instalación que se cree que es un campo de reeducación donde se detiene a la mayoría de las minorías étnicas musulmanas, en Artux, al norte de Kashgar, en la región occidental china de Xinjiang, el 2 de junio de 2019. (Greg Baker/AFP/Getty Images)

Tras esta horrible experiencia, Liu dejó Xinjiang para trabajar en Beijing y logró cambiar su hukou (sistema chino de registro de hogares) de Xinjiang a Shenzhen. Sin embargo, el sistema de vigilancia del PCCh lo ha estado siguiendo como un fantasma.

“Desde que nací en Xinjiang, mi hukou, mi número de tarjeta de identificación comienza con 65, cada vez que me hospedo en un hotel o tomo el transporte público como trenes en cualquier parte del país, la policía me detiene. Como nací allí y mi hukou estaba allí, me pondrán en otra categoría. Cuando me alojo en un hotel, la policía viene a verme, me pregunta qué estoy haciendo, cuántos días me quedo, mis contactos… todo”.

Desde 2020, Liu había estado pensando en irse de China.

El 24 de septiembre de 2022, Liu vio el reportaje de CNN sobre Wang Qun. Por primera vez, supo de la existencia de una ruta de tráfico hacia Estados Unidos.

El 25 de septiembre, la solicitud de pasaporte de Liu fue rechazada. El motivo aducido por las autoridades es «viaje internacional no esencial». Inspirado por los internautas, Liu volvió a solicitar el pasaporte el 30 de septiembre con el pretexto de «hacer un examen IELTS en Macao», refiriéndose al Sistema Internacional de Evaluación de la Lengua Inglesa. El 14 de octubre, Liu obtuvo su pasaporte.

El 27 de octubre, Liu fue al consulado de Estados Unidos para solicitar una visa de turista, pero se la negaron. De momento, Liu se ha decidido a seguir la misma ruta hacia Estados Unidos que Wang.

1600 millas a través de México en motocicleta

Liu ingresó a Macao desde Zhuhai el 1 de noviembre. Luego voló a Tailandia desde Macao vía Taipei, de Tailandia a Seúl, de Seúl a la ciudad de Panamá, y luego pasó forma clandestina a Costa Rica, cruzó Nicaragua, Honduras, Guatemala y llegó a México. Después, tardó 14 días en recorrer en moto 1600 millas de sur a norte a través de México hasta la frontera con Estados Unidos en California.

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Un grupo de inmigrantes ilegales camina por la carretera luego de cruzar el Río Grande desde México. Más adelante, abordarán un autobús con destino a las instalaciones de procesamiento de la Patrulla Fronteriza en McAllen, Texas, el 18 de abril de 2019. (Charlotte Cuthbertson/The Epoch Times)

Liu vivió con miedo y dificultades en el camino.

“Todos los días podría haber controles de inmigración [mexicanos], y luego había bandas, e incluso algunos policías corruptos”, dijo. “Todas estas personas entraron y trataron de robarnos todo nuestro dinero, pero teníamos que dejar algo de dinero para la siguiente banda. Si no teníamos dinero, nos devolvían a la celda de inmigración, así que caminábamos con mucho cuidado todos los días. Cuando veíamos un puesto de control a lo lejos, intentábamos evitarlo».

A pesar de las dificultades del camino, a Liu no le importaba porque tenía un objetivo en mente.

Liu se negó a decir mucho sobre el proceso específico de ingreso a Estados Unidos y dijo que en ese momento finalmente se sintió aliviado.

“Sentí que finalmente estaba libre de esos miedos y podía levantarme y seguir adelante con dignidad”.

En el camino, Liu se encontró con unos 50 chinos que intentaban escabullirse a través de la frontera sur hacia Estados Unidos.

El aumento del tráfico ilegal de chinos genera preocupaciones

Victor Ávila, exagente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y experto en seguridad fronteriza, le dijo a Texas Scorecard que, según su fuente, miles de ciudadanos chinos se apresuraban a llegar a la frontera procedentes de América del Sur.

El número de chinos que cruzan ilegalmente la frontera sur de Estados Unidos se ha disparado, lo que ha despertado la preocupación en Washington.

En los últimos dos años, la afluencia de inmigrantes ilegales en la frontera sur de Estados Unidos se ha  disparado, alcanzando 1,734,686 en 2021, un 278 por ciento más que los 458,088 en 2020. El número de inmigrantes ilegales que cruzaron la frontera sur en 2022 alcanzó los 2,378,944, un 419 por ciento de aumento con respecto a 2020.

Esta es una “oportunidad perfecta” para que los servicios de seguridad del PCCh coloquen a su personal en Estados Unidos, dijo a Fox Gordon Chang, un experto en China radicado en Estados Unidos.

“Nuestra frontera sur está indefensa y están entrando malos actores”, dijo. “Tenemos que tomar el control de la situación».

Víctor Ávila, un agente retirado de ICE, coincide en que las personas clandestinas suponen una grave amenaza para la seguridad porque es probable que entre ellas se escondan espías del PCCh.

«Se trata de un problema de seguridad nacional… porque sabemos quién es China», dijo Ávila. «Son nuestro mayor adversario».

Tales preocupaciones están justificadas, ya que la influencia del PCCh se está extendiendo por América Latina y el Caribe, con un comercio bidireccional que se ha disparado de USD 18,000 millones en 2002 a casi USD 316,000 millones en 2019. China es el mayor socio comercial de Brasil, Chile, Perú y Uruguay. Tiene acuerdos de libre comercio con Chile, Costa Rica y Perú. Además, 19 países del hemisferio occidental han expresado su voluntad de participar en la Iniciativa de la Franja y la Ruta del PCCh, y Beijing ha establecido unos 45 Institutos Confucio en la región.

Para el PCCh, hay que penetrar por todas las vías, dijo Chen.

«Desde luego, no han renunciado a otros medios para entrar de forma legal, pero el tráfico ilícito tiene una ‘ventaja’ sobre los visados legales», dijo.

“No importa qué tipo de visa solicite, siempre debe enviar información personal sobre usted. Sus antecedentes familiares, su entorno laboral, todo eso tiene que ser verificado por la Embajada de Estados Unidos. Pero si usted entra de forma ilegal, no hay forma de verificarlo. Uno es lo que dice ser».


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