Un marine ebrio irrumpió en una casa y estaba preparándose un desayuno cuando el dueño de la casa lo sorprendió, pero el intruso lo mandó a dormir.
El hecho ocurrió en Dunedin, una ciudad ubicada en el condado de Pinellas, Florida, EE. UU., y el hombre fue arrestado tras el incidente esta semana, de acuerdo con Marine Times.
Los investigadores del condado dijeron que Gavin Crim, un marine de 19 años irrumpió en una casa de Safety Harbor en el bloque 2400 de Huntington Boulevard. El robo ocurrió justo después de las 4 a.m. del martes (3 de septiembre), mientras la víctima estaba en el lugar, según Fox 13 de Tampa.
Crim entró al inmueble a a través de una puerta trasera sin llave, y comenzó a cocinar y luego a comer la comida que estaba en la casa. La víctima se enfrentó al intruso quien le dijo que «se volviera a dormir», dijeron las autoridades, según esta fuente.
Cuando el dueño de la casa le dijo a Crim que estaba llamando al 911, este huyó de la casa, dijeron los agentes.
Más tarde los encontraron escondido detrás de la casa en un área boscosa y pantanosa.
Durante una entrevista, los agentes dijeron que el joven admitió haber irrumpido en la casa.
El informe de arresto dice que estaba bajo los efectos del alcohol.
Crim fue arrestado con cargos de robo y fue liberado con una fianza de USD 1000.
Descubre que le han robado en su casa pero termina naciendo una amistad
En una nota relacionada, la maestra canadiense Leah Ross al regresar a su casa en Winnipeg, encontró la puerta abierta y sus pertenencias esparcidas por doquier.
Descubrió que un ladrón había irrumpido en su casa entrando a través de la ventana del sótano.
En ese momento en medio de su miedo una joven se detuvo en su puerta. Era la persona que había entrado a la casa a robar, y que había regresado porque había olvidado su celular.
Aunque Leah Ross llamó a la policía luego se negó a presentarle cargos, pues siendo maestra descubrió que la joven necesitaba ayuda.
Luego de conversar por largo largo con la joven, terminaron compartiendo ponche y galletas de jengibre.
“El oficial dijo que en todos sus años nunca había visto a una víctima sirviendo a su intruso algo como ponche y galletas de jengibre”, recordó Ross.
Las dos se han mantenido en contacto a través de mensajes de texto. Y para la Navidad del año pasado, Ross le compró a la joven un nuevo maquillaje como regalo.
***
Historias de convicción:
Trabajó para la mafia y fue un adicto durante décadas, al fin se libera con ayuda de la meditación
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
