La representante Elise Stefanik (R-N.Y.) presentó el martes un proyecto de ley que busca bloquear los fondos federales para los colegios y universidades estadounidenses que tengan vínculos con el régimen chino, una medida que, según ella, combatirá los intentos de Beijing por «socavar» a Estados Unidos.
La legislación denominada “Ley para acabar con las asociaciones comunistas chinas en las universidades” que limitaría los fondos de los contribuyentes a las instituciones que tienen asociaciones con los Institutos Confucio (CI, por sus siglas en inglés) financiados por Beijing y la República Popular de China.
“El PCCh participa en el genocidio, censura el discurso e influye en nuestra comunidad académica. ¡El contribuyente $$ NO debe financiar sus asociaciones con escuelas de EE. UU.! Punto”, dijo la congresista en una declaración a través de Twitter.
Según el proyecto de ley, todos los colegios y universidades estadounidenses que tengan “una asociación contractual en vigor con una entidad que sea propiedad o esté manejada, directa o indirectamente, por el Gobierno de la República Popular China, u organizada según las leyes de la República Popular China”, tendrá bloqueados los fondos federales, informó Fox News.
La legislación exime los fondos del Departamento de Educación que se proporcionan directamente a los estudiantes.
Los CI se consideran sitios para aprender mandarín, estudiar cultura china y obtener una beca. Están financiados y en gran parte atendidos por Hanban, una organización sin fines de lucro que afirma ser no gubernamental, sin embargo de hecho está controlada directamente por el Partido Comunista Chino (PCCh) de Beijing, según un informe del subcomité de investigaciones del comité de seguridad nacional del Senado (pdf).
Los institutos fueron objeto de un intenso escrutinio por parte de funcionarios de EE. UU. bajo la administración Trump debido a preocupaciones de que difunden propaganda china, restringen la libertad académica y facilitan el espionaje en las aulas de EE. UU.
El 31 de diciembre de 2020, la administración Trump presentó una norma propuesta, denominada «Establecimiento del requisito para que las escuelas certificadas por el programa de estudiantes y visitantes de intercambio divulguen acuerdos con las aulas e Institutos Confucio», que buscaba asegurar que las universidades y escuelas K-12 que están certificadas para albergar programas de intercambio extranjero revelen sus vínculos financieros con los CI y las Aulas Confucio afiliadas.
Sin embargo, esa propuesta fue descartada silenciosamente por la administración de Biden el 26 de enero, según la Oficina de Información y Asuntos Regulatorios de EE. UU. (OIRA, por sus siglas en inglés), que es una división de la oficina de presupuesto de la Casa Blanca.
Stefanik tildó el martes a los demócratas de la Cámara de Representantes de ser «débiles con China», y agregó en Twitter que ella «¡siempre será FUERTE para Estados Unidos!»
El régimen chino se ha «comprometido en un esfuerzo sostenido por socavar todas las facetas del poder estadounidense a través de campañas de influencia dentro de Estados Unidos» y se ha «involucrado en el robo de cientos de miles de millones de dólares en propiedad intelectual e investigación académica y científica en los campus universitarios, dentro de los laboratorios nacionales y dentro del sector privado”, dice el nuevo proyecto de ley de la congresista, según Fox News.
La legislación señala los intentos del PCCh de reclutar a estadounidenses de origen chino y chinos étnicos en suelo estadounidense «para la recopilación de inteligencia y la coacción para promover la ideología y la agenda del PCCh».
El martes por separado, Stefanik copatrocinó un proyecto de ley, denominado «Ley de Oposición de Negocios con Compañías Militares Chinas». El mismo garantizaría que todas y cada una de las empresas afiliadas u operadas en nombre de las fuerzas armadas chinas se hagan públicas y sean sancionadas.
«Como sabemos, el ejército chino está involucrado en acciones hostiles contra Estados Unidos y un genocidio de minorías étnicas», afirma un comunicado, refiriéndose a los abusos de derechos humanos que se están cometiendo contra los uigures y otras minorías étnicas en la región noroccidental china de Xinjiang.
«A pesar del enfoque blando del presidente Biden y los demócratas hacia China, yo continuaré proponiendo y apoyando una legislación que combata enérgicamente su comportamiento maligno y antiamericano y promueva los intereses de Estados Unidos en el país y en el extranjero», agregó Stefanik en un comunicado.
Con información de Frank Fang.
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