Texas, Indiana y Oklahoma anunciaron el lunes que se unirán a un número creciente de estados liderados por el Partido Republicano para poner fin a las prestaciones federales por desempleo ampliadas que se aplicaron el año pasado a través de los planes para paliar la pandemia.
En una carta (pdf) dirigida a la Administración Biden, el gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que los pagos extra de 300 dólares semanales bajo el nuevo plan de estímulo del presidente, de 1.9 billones de dólares, terminarán el 26 de junio, antes de su fecha de vencimiento en septiembre.
Se une así a al menos una docena de otros gobernadores, todos ellos republicanos, que están optando por no recibir las prestaciones federales adicionales por desempleo este verano. Los republicanos argumentan que estas prestaciones han desanimado a la gente a volver a la fuerza laboral y se han convertido en un lastre para la recuperación.
Abbott dijo en su carta que la economía de Texas está «en auge» y que los empleadores están contratando en comunidades de todo el estado. Citando a la Comisión de la Fuerza Laboral de Texas (TWC), el gobernador republicano dijo que el número de puestos de trabajo vacantes en el estado es casi idéntico al número de tejanos que están recibiendo prestaciones por desempleo.
Ese balance, dijo Abbott, no incluye los cuantiosos puestos de trabajo que normalmente no aparecen en la lista, como los de la construcción y los restaurantes.
«De hecho, hay casi un 60 por ciento más de empleos vacantes (y listados) en Texas hoy que en febrero de 2020, el mes antes de que la pandemia golpeara a Texas», dijo el gobernador.
Abbott dijo que el estado debe centrarse en ayudar a los tejanos desempleados a ponerse en contacto con las más de un millón de ofertas de trabajo, en lugar de pagar las prestaciones por desempleo para que se queden fuera de las listas de empleo.
También hay que tomar medidas para hacer frente al alto nivel de solicitudes de desempleo fraudulentas que se presentan, dijo.
«La TWC estima que casi el 18 por ciento de todas las solicitudes de prestaciones por desempleo durante la pandemia son o se sospecha que son fraudulentas, lo que supone un total de más de 800,000 solicitudes, con un valor de hasta 10,400 millones de dólares, si se hubieran pagado todas las solicitudes», afirmó su oficina.
Otras prestaciones por desempleo ampliadas en Texas, entre ellas la que hace que los trabajadores por cuenta ajena y los autónomos tengan derecho a la ayuda por primera vez, también terminarán en junio.
Indiana y Oklahoma anunciaron el lunes medidas similares y pondrán fin a los pagos semanales el 19 y el 26 de junio, respectivamente.
Respondiendo a las peticiones de las empresas que pretenden animar a los estadounidenses a volver al trabajo, los líderes republicanos de los estados de Arkansas, Georgia, Montana y Carolina del Sur también han dicho recientemente que recortarán las prestaciones semanales por desempleo ampliadas. Otros estados que han anunciado medidas similares son Alabama, Arizona, Idaho, Iowa, Misuri, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Tennessee, Utah y Wyoming.
El American Action Forum, un instituto dedicado a la política de centro-derecha, dijo en un informe de febrero que el 37 por ciento de los trabajadores podrían ganar más con el desempleo en el nivel de 300 dólares de lo que ganarían si volvieran a trabajar.
El Departamento de Trabajo informó a principios de este mes de que el crecimiento del empleo en el país fue mucho menor de lo previsto, ya que solo se añadieron 266,000 puestos de trabajo en abril, frente al millón estimado. La tasa de desempleo nacional pasó del 6 por ciento en marzo al 6.1 por ciento en abril.
Por su parte, el presidente Joe Biden ha advertido que los estadounidenses deben aceptar ofertas de trabajo adecuadas, porque de lo contrario se arriesgan a perder su ayuda económica.
«Si estás recibiendo prestaciones por desempleo y te ofrecen un trabajo adecuado, no puedes rechazar ese trabajo y seguir recibiendo beneficios de desempleo», dijo el presidente la semana pasada.
Con información de Associated Press.
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