Un tribunal de apelaciones ordenó el lunes la liberación de un hombre detenido sin derecho a fianza por la presunta agresión a policías fuera del Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero.
El juez de distrito Thomas Hogan, nominado por Reagan, denegó en mayo la solicitud de libertad bajo fianza en espera de juicio para George Tanios y Julian Khater, ambos acusados de trabajar juntos rociando productos químicos en la cara de los policías fuera del Capitolio.
Hogan alegó que no había forma de garantizar la seguridad de la comunidad si cualquiera de los dos hombres quedaba en libertad.
Pero un panel de la corte de apelaciones en el nuevo fallo dijo que Hogan «se equivocó evidentemente» al bloquear la liberación de Tanios.
«El expediente refleja que Tanios no ha sido condenado por delitos graves, no tiene vínculos con ninguna organización extremista y no ha tenido un comportamiento delictivo después del 6 de enero que pudiera demostrar que representa un peligro para la comunidad en el sentido de la Ley de Reforma de la Fianza», dijo el panel en el fallo de 2 páginas.
Los abogados del acusado y el fiscal no respondieron a las solicitudes de comentarios.
La orden de libertad no entrará en vigor hasta siete días después de que se resuelva cualquier petición de una nueva audiencia.
Los jueces del Circuito de Estados Unidos Karen Henderson, designada por George H.W. Bush; la jueza Judith Rogers, designada por Clinton; y el juez Justin Walker, designado por Trump, formaron parte del panel que emitió el nuevo fallo.
El fallo es el primero de este tipo relacionado con la irrupción del 6 de enero.
En marzo, un panel diferente del mismo tribunal dijo que la detención preventiva de dos acusados, Lisa Eisenhart y Eric Munchel, era incorrecta, pero no ordenó su liberación. Sin embargo, tras la decisión, los fiscales retiraron su petición de mantener detenidos a madre e hijo.
Los fiscales dicen que Tanios, de 39 años y propietario de una tienda de bocadillos en Virginia Occidental, llevaba una lata de spray para osos el 6 de enero. Khater supuestamente lo tomó de la mochila y lo roció en dirección a un grupo de policías, entre ellos el oficial de la Policía del Capitolio de Estados Unidos Brian Sicknick.
Tanios y Khater fueron detenidos en marzo y han permanecido en prisión desde entonces.
Los medios de comunicación reportaron falsamente que Sicknick había sido asesinado por personas en el Capitolio, pero la autopsia determinó que había muerto por causas naturales.
Los fiscales argumentaron en abril que ninguno de los dos hombres debía ser puesto en libertad. Alegaron que la gravedad de los presuntos delitos y el peso de las pruebas deberían obligar al juez a bloquear las peticiones.
«Los delitos imputados implican una conducta agresiva y no provocada contra tres policías uniformados que intentaban contener a una turba violenta de miles de personas y proteger el Capitolio. Los acusados programaron el ataque a los oficiales para que coincidiera con la cercana irrupción en los espacios para bicicletas, de modo que sorprendieran a los oficiales cuando se encontraban en medio de un acontecimiento estresante y estaban desprevenidos. Los acusados no respetaron a los agentes de la ley que estaban completamente uniformados y hacían su trabajo», escribieron en una presentación judicial.
«Por lo tanto, el gobierno cree que si los acusados hacen caso omiso de la autoridad de las fuerzas policiales, no acatarán las condiciones de liberación de este tribunal».
En su solicitud al tribunal de apelaciones para que revise la orden de Hogan, los abogados de Tanios afirmaron que se considera inocente y que él niega cada uno de los cargos.
«La liberación está justificada en este caso. En primer lugar, el gobierno no cumplió con su carga de la prueba, incluso por prueba irrefutable, para demostrar que el Sr. Tanios es un riesgo de fuga. En segundo lugar, el gobierno no cumplió con su carga de demostrar pruebas claras y convincentes de que el Sr. Tanios es un peligro para cualquier otra persona o la comunidad. En tercer lugar, en el caso de que este tribunal considere de alguna manera que el gobierno —a través de su ofrecimiento y unos pocos videos cortos— ha cumplido con su carga de la prueba, el análisis ordenado por la Ley de Reforma de la Fianza no termina», escribieron.
“El gobierno aún tiene la carga de probar ante este Tribunal que existen condiciones o combinaciones de condiciones que no garanticen razonablemente la aparición del señor Tanios y la seguridad de cualquier otra persona o comunidad. En cada paso, el gobierno no cumple con su carga de la prueba».
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