El presidente electo Donald Trump dijo el martes que no descartaría la posibilidad de utilizar la fuerza militar para tomar el control del Canal de Panamá y Groenlandia, haciendo hincapié en su importancia estratégica para la seguridad nacional de Estados Unidos.
En una rueda de prensa en su complejo turístico de Mar-a-Lago, Trump dijo que «no puede asegurar» que no se utilice la coerción militar o económica para tomar el control de esos dos lugares estratégicos, en respuesta a una pregunta.
«No, no puedo asegurarlo en ninguno de esos dos, pero puedo decir esto, los necesitamos para la seguridad económica», respondió Trump.
«Puede ser que tenga que hacer algo. Mire, el Canal de Panamá es vital para nuestro país. Está siendo operado por China. Le dimos el Canal de Panamá a Panamá. Nosotros no se lo dimos a China, y ellos han abusado de él. Han abusado de ese regalo».
En recientes publicaciones en las redes sociales, Trump expresó su frustración por la creciente influencia de China en el canal, a pesar de que fue construido por Estados Unidos hace más de 110 años con un gran costo financiero y humano.
El Canal de Panamá, inaugurado en 1914 tras una década de construcción liderada por Estados Unidos, fue devuelto gradualmente a Panamá en virtud de un tratado firmado en 1977 por el presidente Jimmy Carter.
Durante su discurso, Trump criticó a Carter por entregar el Canal de Panamá.
«Carter se los dio por un dólar (…) Eso me pareció algo terrible. Fue la estructura más cara jamás construida en la historia de nuestro país», dijo Trump.
El presidente electo dijo que esta acción le costó las elecciones a Carter en 1980.
En 1999, Panamá asumió el control total del canal, que desde entonces se ha convertido en una de las rutas marítimas más transitadas del mundo, conectando los océanos Atlántico y Pacífico.
Sin embargo, la construcción del canal tuvo un alto costo humano. Las estimaciones oficiales sugieren que unos 5600 trabajadores murieron durante el esfuerzo liderado por Estados Unidos para construir el canal. Además, se calcula que casi 22,000 personas murieron durante un intento anterior de construcción, dirigido por Francia.
Trump reiteró que 38,000 personas murieron durante la construcción de la vía fluvial.
«Ellos se ríen de nosotros porque piensan que somos estúpidos, pero ya no lo somos. Así que el Canal de Panamá está en discusión con ellos ahora mismo», dijo Trump durante la rueda de prensa.
Trump también declaró que Estados Unidos necesita Groenlandia, un territorio autónomo de Dinamarca, por «motivos de seguridad nacional».
«La gente ha estado hablando de ello durante mucho tiempo. Hay aproximadamente 45,000 personas allí», dijo Trump.
«Ellos deberían cederlo, porque lo necesitamos para la seguridad nacional, es para el mundo libre, estoy hablando de proteger el mundo libre».
«Ustedes tienen barcos chinos por todas partes. Hay barcos rusos por todas partes. Nosotros no vamos a permitirlo. Nosotros no vamos a permitirlo».
Trump cuestionó que Dinamarca tenga algún derecho sobre Groenlandia.
«La gente probablemente votará por la independencia o por entrar en Estados Unidos», dijo el presidente electo.
Si Dinamarca rechazara la propuesta estadounidense, dijo Trump, «arancelaría a Dinamarca a un nivel muy alto».
En recientes posteos en las redes sociales, Trump dejó entrever la idea de tomar el control de Groenlandia y el Canal de Panamá, y propuso convertir a Canadá en el estado número 51 para proteger la seguridad nacional de Estados Unidos.
En virtud del Tratado de Neutralidad de 1977, Panamá y Estados Unidos acordaron que la vía navegable permanecería permanentemente neutral, con acceso y peajes justos para todos los países. Por lo tanto, cualquier desafío chino a este pacto puede requerir que Estados Unidos emplee la fuerza militar.
En los últimos años, los mandos militares estadounidenses expresaron su gran preocupación por la creciente presencia militar y tecnológica de Beijing en América Latina, incluido Panamá.
En 2017, Panamá cortó lazos diplomáticos de larga data con Taiwán para establecer lazos más estrechos con China. También se convirtió en el primer país latinoamericano en respaldar el plan de infraestructuras de Beijing, la Iniciativa de La Franja y la Ruta. Desde entonces, las empresas chinas han estado muy involucradas en proyectos logísticos y de infraestructura cerca del canal, incluidas las operaciones portuarias en ambos extremos de la vía acuática.
Trump criticó anteriormente lo que llamó las tarifas «exorbitantes» que Panamá ha estado cobrando a Estados Unidos, su Armada y corporaciones estadounidenses por el paso.
El 22 de diciembre, el presidente panameño, José Raúl Mulino, respondió a los posteos de Trump en las redes sociales sobre el Canal de Panamá diciendo que «cada metro cuadrado» del canal pertenece a su país.
En un discurso televisado, Mulino dijo que la soberanía y la independencia de Panamá no eran negociables.
Trump replicó rápidamente: «¡Eso ya lo veremos!».
En un posteo del 22 de diciembre, Trump también compartió una imagen de la bandera estadounidense ondeando sobre el Canal de Panamá con el texto «¡Bienvenidos al Canal de Estados Unidos!»
La oferta de Trump de comprar Groenlandia no es nueva. Él propuso la idea por primera vez en 2019, pero fue rechazada por la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, que la calificó de «absurda».
En respuesta, Trump canceló una visita planeada a Dinamarca, calificando los comentarios de Frederiksen de «desagradables» e «inapropiados».
Trump indicó más tarde a los periodistas que su idea era normal haciendo referencia a los esfuerzos anteriores de Estados Unidos para comprar la isla estratégica, incluida la propuesta de Harry Truman de comprarla por 100 millones de dólares en 1946.
Según el exasesor de seguridad nacional de Trump, Robert O’Brien, se espera que el territorio adquiera cada vez más importancia en los próximos años.
«Es estratégicamente muy importante para el Ártico, que va a ser el campo de batalla crítico del futuro», dijo O’Brien a Fox News el 29 de diciembre, añadiendo que “los rusos y los chinos están por todo el Ártico” y que Dinamarca es incapaz de defender adecuadamente la vasta isla.
El 22 de diciembre, Trump anunció el nombramiento del cofundador de PayPal, Ken Howery, como embajador de Estados Unidos en Dinamarca. En su mensaje, Trump reiteró su idea de adueñarse de Groenlandia.
«Por motivos de Seguridad Nacional y Libertad en todo el Mundo, Estados Unidos de América consideran que la propiedad y el control de Groenlandia es una necesidad absoluta», escribió el presidente electo.
Howery, que fue embajador de Estados Unidos en Suecia durante el primer mandato de Trump, representará los intereses estadounidenses en la región, dijo Trump.
Horas después de la declaración de Trump, el gobierno danés anunció un aumento sustancial del gasto en defensa para Groenlandia, prometiendo al menos 1500 millones de dólares.
«Groenlandia es nuestra. No estamos en venta y nunca lo estaremos», dijo el primer ministro groenlandés, Mute Egede, en una declaración.
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