UVALDE, Texas–John Sewell, un granjero, recientemente recogió un panfleto que se había caído de la mochila de un inmigrante ilegal que estaba invadiendo su propiedad cerca de Uvalde, Texas, a unas 50 millas de la frontera entre Estados Unidos y México.
A un lado hay un mapa que detalla las rutas de transporte de Panamá a Estados Unidos. El tríptico señala a los inmigrantes con gran detalle dónde pueden encontrar refugio o recibir ayuda médica en el camino. El otro lado está lleno de información útil, en español, que incluye cómo viajar de manera más segura a través de bosques y selvas, encontrar refugio, obtener ayuda médica, y tratar con las autoridades de inmigración.
El panfleto fue publicado por la Cruz Roja y se titula «Mensajes de autocuidado para personas migrantes».
Según Jessica Vaughan, directora de estudios de políticas en el Centro de Estudios de Inmigración con sede en Washington, el folleto cruza una línea más allá de proporcionar información vital para facilitar la inmigración ilegal.
“Es prácticamente una hoja de ruta o un TripTech para un inmigrante ilegal”, dijo a The Epoch Times. “Una cosa es dar agua a los inmigrantes. Otra cosa muy distinta es ayudarlos a inmigrar ilegalmente y violar la soberanía de una frontera”.
El folleto incluye consejos como “viajar en grupo es más seguro, sobre todo para las mujeres” y mantenerse en contacto con familiares y amigos, “sobre todo antes de cruzar una frontera”.
Advierte contra subirse o bajarse de un tren cuando está en movimiento o mojado, pero luego advierte: «En caso de que bajes del tren en marcha, no te quedes parado sigue corriendo para que otros no te caigan encima», y «Evita subir al tren si no has comido o descansado, podrías caerte si te da sueño».
Continúa diciendo: “No te ocultes en vehículos o en espacios reducidos donde podrías asfixiarte, ahogarte o enfermar. Procura siempre tener espacio para respirar».
Este año en Uvalde, donde Sewell obtuvo el folleto, la Patrulla Fronteriza vio un aumento del 911 por ciento en extranjeros ilegales que viajan clandestinamente en trenes de carga desde la frontera a San Antonio.
En un tren inspeccionado el 13 de agosto por la Patrulla Fronteriza, los agentes encontraron 20 extranjeros ilegales escondidos en las camas de camionetas nuevas que estaban siendo transportadas en dos vagones de tren diferentes. Varios de los extranjeros habían sido detenidos el día anterior por el mismo agente en el mismo lugar. Todos eran hombres que viajaron solos desde México y Honduras.
El mapa también destaca los refugios de la Cruz Roja en México y otros lugares administrados por organizaciones religiosas, como la Casa del Buen Samaritano en Oaxaca, México, y Caridades Católicas en Tucson, Arizona.
Vaughan dijo que, en lugar de ser un «ejercicio benigno del tipo clandestino», el panfleto es «un comportamiento delictivo tentador que también es muy, muy peligroso e ilegal».
Ella dijo que la Cruz Roja y otras organizaciones humanitarias deberían decirles a los inmigrantes que no vengan. Señaló que la mayoría de los inmigrantes ilegales que ingresan a los Estados Unidos no cumplen con los criterios para el asilo y un juez de inmigración no les otorgará el estatus de asilo. Muchos centroamericanos, la población más grande de inmigrantes ilegales, no terminan solicitando asilo una vez que están en los Estados Unidos, y de los que lo hacen, menos del 15 por ciento lo obtienen.
Un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) dijo que la organización no previene ni fomenta la inmigración.
“Como organización imparcial, neutral e independiente, nuestras acciones se enfocan en atender las necesidades humanitarias de los migrantes para asegurar que sean tratados con dignidad, tanto en sus países de origen, tránsito y destino, como independientemente de su estatus migratorio”, dijo el vocero a The Epoch Times por correo electrónico.
El CICR no respondió a una pregunta sobre dónde están disponibles los folletos, pero los logotipos de la Cruz Roja de siete países están impresos en el volante, incluidos Estados Unidos, México, Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica y Panamá.
El portavoz dijo que la organización brinda asistencia humanitaria en puntos clave a lo largo de la ruta.
“También les informamos de los riesgos que están asumiendo al utilizar la ruta migratoria”, dijo el vocero.
“Es fundamental prevenir la pérdida de vidas y promover un enfoque humanitario. Atender las necesidades de esta población vulnerable es una responsabilidad compartida, de las autoridades de los países de origen, tránsito y destino, y de la comunidad internacional”.
El CICR, con sede en Ginebra, operó en 100 países en 2019 y gastó más de USD 2000 millones, según su último informe anual. Está financiado principalmente por donaciones voluntarias de gobiernos y sociedades nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, según su sitio web.
Vaughan dijo que Estados Unidos debería investigar cómo se publicó el volante y quién lo financió.
“Ellos deberían ayudar a las personas en los países donde viven los inmigrantes, no ayudar e incitar a esta inmigración ilegal que es tan peligrosa y ha creado tantos problemas para todos los países donde ocurre”, dijo.
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