Las elecciones de 2020 estuvieron llenas de problemas, dijo el exdirector en funciones de la Inteligencia Nacional Richard Grenell.
«Hemos estado sobre el terreno en Nevada durante un tiempo y hemos investigado todo tipo de denuncias de fraude electoral. Y hemos planteado una larga lista de episodios preocupantes», dijo Grenell al programa American Thought Leaders de The Epoch Times.
Grenell apoya los planes del presidente Donald Trump que pretenden impugnar los resultados de las elecciones en Nevada, alegando irregularidades como el fraude.
Los episodios incluyen el hecho de que unas 42,000 personas votaron dos veces, que aproximadamente 1500 votaron estando muertas, y que una gran cantidad de votantes violaron los requisitos de residencia, dijo Grenell. Otras anomalías incluyen una auditoría que sugirió que el 3 por ciento de los votos por correo se emitieron de manera fraudulenta y que las memorias USB de las máquinas de votación fueron supuestamente alteradas.
La campaña de Trump y sus aliados están trabajando para recabar pruebas de lo que ocurrió durante las elecciones, pero están siendo obstaculizados por varios funcionarios.
«Uno de los problemas que creo que estamos planteando en esta saga en curso son las afirmaciones de los medios de comunicación, de los demócratas y de los gobiernos locales de que no tenemos la prueba. Y la realidad es que las boletas y los sobres están en posesión de los gobiernos locales, como el caso de los funcionarios del Condado de Clark. Podemos alertar, podemos señalar la información concerniente, y podemos mostrar la información disponible públicamente que sugiere fraude electoral, pero no podemos tener acceso a las boletas o a los sobres que tienen las firmas en ellos. Eso es propiedad del gobierno local», explicó Grenell, que también ha sido embajador de Trump en Alemania y enviado especial para las relaciones entre Serbia y Kosovo.
«Y no es justo, por ejemplo, que los funcionarios del Condado de Clark digan ‘dónde está su prueba’, cuando tienen la prueba y no están dispuestos a dejarnos acceder a ella. Hace poco un juez local dijo que nuestro equipo podía ir a examinar la máquina de Agilis y la información que buscábamos. Y, por lo tanto, fuimos a [ver a] los funcionarios del Condado de Clark y esperábamos examinar la máquina, y examinar los votos y las firmas. Y lo que obtuvimos fue un recorrido por el lugar. No fue lo que el juez ordenó», añadió Grenell.
El juez de distrito James Russell, que fue elegido por los votantes estatales, ordenó la semana pasada a los funcionarios del Condado de Clark que permitieran el examen de las máquinas de votación y otros artículos. Un portavoz del condado dijo a The Epoch Times por correo electrónico que los funcionarios se acomodaron a las peticiones de la campaña y «se les permitió inspeccionar todo lo que quisieron». La campaña no respondió a una solicitud de comentarios.
Grenell alegó que los funcionarios y los medios de comunicación inicialmente afirmaron que no había fraude, luego dijeron que no había fraude generalizado, y «ahora dicen que no se puede probar el fraude generalizado».
La estrategia parece ser «retrasar [la investigación] todo lo que puedan y agotar el tiempo», añadió.
El viernes Russell escuchó a la campaña de Trump y a los funcionarios del condado. Desestimó una demanda de la campaña que pretendía rechazar decenas de miles de votos.
El candidato presidencial demócrata Joe Biden ha declarado la victoria en las elecciones, pero Trump no ha cedido y dice que al final podría ganar un segundo mandato. The Epoch Times, debido a las numerosas batallas judiciales en curso, no ha declarado ganador a ningún candidato todavía.
Grenell dijo que cree que hay tiempo para impugnar los resultados de las elecciones, teniendo en cuenta las reuniones del Colegio Electoral. También culpó a la actual actitud hacia las acusaciones de fraude electoral y otras irregularidades, diciendo que están manchadas en algunos lugares por un claro sesgo mediático.
«No creo que en Washington, D.C., ya no tengamos periodistas. Creo que tenemos defensores en ambos lados, ya sean conservadores o liberales y eso es muy malo para el sistema. Creo que está arruinando el sistema de muchas maneras, porque tenemos periodistas que son realmente defensores», dijo. «Y no me sorprende que muchos de estos reporteros del New York Times, The Washington Post, CNN, AP, USA Today —podría seguir y seguir— no me sorprende que muchos de estos reporteros se apresuren a ungir a Joe Biden sin mirar realmente los cargos de fraude».
Trump necesita un segundo mandato para reformar realmente el gobierno, añadió Grenell.
«Creo que el gran legado de la Administración Trump y del presidente Trump es traer esa perspectiva externa a Washington, para comenzar la reforma y el cuestionamiento, y el cambio que realmente necesitaba suceder. El presidente Trump necesita ocho años para hacer eso. Así que tengo la esperanza de que veremos otros cuatro años del presidente Trump», dijo.
«Y eso puede suceder a partir de 2021, o dentro de cuatro años, en 2025. Quiero ver que el presidente Trump continúe cambiando a Washington porque, por primera vez en mi vida, tenemos un presidente que fue lo suficientemente duro y desinteresado con las reglas de la prensa de Washington para poder asumir los conflictos que necesitaban abordarse».
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