Esta semana se volverá a colocar el vallado alrededor del Capitolio de Estados Unidos mientras los agentes de la ley se preparan para una manifestación prevista para el 18 de septiembre.
Matt Braynard, un exagente de la campaña de Trump, está organizando la manifestación para pedir la liberación de las personas que no están acusadas de cometer actos de violencia el 6 de enero durante la irrupción en el Capitolio, pero que aún permanecen arrestadas.
Después de informar a los miembros del Congreso el lunes, el jefe de policía del Capitolio, Tom Manger, confirmó que la valla se volverá a colocar antes de la manifestación.
“La valla se levantará uno o dos días antes y si todo va bien, se desmontará rápidamente después”, dijo.
Los organizadores esperan que cientos de personas asistan al evento “Justicia para J6”, cuyo nombre hace alusión a los arrestados el 6 de enero. Esta podría ser la reunión más grande en el Capitolio desde inicios de este año.
Manger le dijo a The Epoch Times en un correo electrónico reciente que su agencia está «monitoreando de cerca» el evento planeado, pero que confía en que, dados los cambios en la recopilación y el intercambio de inteligencia, realizados después del 6 de enero, «el trabajo que estamos haciendo asegurará que nuestros oficiales tengan lo que necesitan para mantener a todas las personas a salvo».
Una portavoz del Departamento de Policía Metropolitana dijo por correo electrónico que la agencia estará «completamente preparada» para los próximos eventos.
“Parecen muy, muy bien preparados. Mucho mejor preparados que antes del 6 de enero. Creo que están listos para lo que pueda suceder”, les dijo a los reporteros el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.) después de ser notificado sobre los arreglos de para la manifestación por Manger y por otros oficiales de la Policía del Capitolio.
La presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.) dijo que el plan de la Policía del Capitolio «parece mucho mejor» que el que estaba en vigor antes del 6 de enero.
Braynard le dijo a The Epoch Times la semana pasada que el hecho de que el vallado vuelva a levantarse no es relevante para la manifestación.
«Lo que decidan hacer con las vallas, no es realmente de mi incumbencia», dijo.
En varias publicaciones en las redes sociales, dijo que la manifestación está destinada a ser pacífica y que los organizadores han trabajado durante dos meses con el Capitolio, Washington y la policía de parques, además de las entidades de seguridad privada.
Habrá un «perímetro seguro» y detectores de metales en el evento, que será administrado al 100 por ciento por su grupo, Look Ahead America, agregó.
La ubicación de la manifestación es Union Square, entre las calles 1st y 3rd, según un correo electrónico enviado a las personas interesadas en asistir, el cual fue observado por The Epoch Times. Está previsto que la manifestación comience a las 12 p.m.
A los posibles asistentes se les dijo que viajaran en grupos, que fueran respetuosos con la seguridad privada y con las fuerzas del orden, que no llevaran ropa ni pancartas de apoyo a un político o expolítico concreto, incluido el expresidente Donald Trump, y que vistieran de rojo, blanco y azul y llevaran pancartas para mostrar su apoyo a las personas encarceladas por haber cometido, presuntamente, delitos el 6 de enero.
La manifestación ha sido fuertemente criticada por los demócratas, que alegan que tiene como objetivo restar importancia a la irrupción al Capitolio del 6 de enero.
«Esta gente vuelve para alabar a las personas que querían matar, a los miembros del Congreso, causando con éxito las muertes – ‘con éxito’ no es la palabra, pero es la palabra, porque es lo que se propusieron hacer- de nuestras fuerzas del orden», dijo la presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), en una rueda de prensa la semana pasada.
Todos los agentes de las fuerzas del orden de Washington o federales que estaban presentes en el Capitolio el 6 de enero y que fallecieron más tarde, murieron por causas naturales o por suicidio, incluido el agente de la policía del Capitolio de Estados Unidos, Brian Sicknick. La única persona que fue asesinada en el Capitolio fue una manifestante desarmada, Ashley Babbitt, que recibió un disparo por un policía del Capitolio.
La oficina de Pelosi no respondió a una solicitud de comentarios.
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