Las autoridades municipales de Portlan, Oregón, están planeando prohibir los viajes a Texas por la ley antiaborto recientemente promulgada en el estado sureño.
El Ayuntamiento de Portland tiene previsto votar el 8 de septiembre una moción de urgencia que prohibiría a la ciudad adquirir bienes o servicios procedentes de Texas, además de impedir que los trabajadores de la ciudad viajen allí.
«La prohibición estará en vigor hasta que el estado de Texas retire su prohibición inconstitucional del aborto o hasta que sea anulada en los tribunales», dijo el alcalde de Portland, Ted Wheeler, en un comunicado de prensa.
«El Ayuntamiento de Portland se mantiene unificado en su creencia de que todas las personas deben tener el derecho a elegir si continúan un embarazo y cuándo lo continúan, y que las decisiones que toman son complejas, difíciles y únicas para sus circunstancias».
La ley de Texas, que entró en vigor el 1 de septiembre, exige a los médicos que intenten detectar el latido del corazón del feto antes de practicar un aborto. Si se detecta un latido, los médicos tienen prohibido interrumpir el embarazo, a menos que consideren que no hacerlo pondría en peligro la vida de la madre embarazada.
Los proveedores de abortos dicen que entre el 85% y el 90% de todos los abortos en Texas están bloqueados por la nueva ley.
Los funcionarios del Estado no están autorizados a aplicar las disposiciones. En su lugar, los ciudadanos particulares pueden demandar a los médicos que supuestamente las violen, o a las personas que supuestamente ayuden a realizar abortos ilegales.
«Esta ley no demuestra preocupación por la salud, la seguridad y el bienestar de quienes pueden quedar embarazadas», dijo la oficina de Wheeler. «Esta ley no reconoce ni muestra respeto por los derechos humanos de quienes pueden quedar embarazadas. Esta ley premia a los ciudadanos por ejercer la vigilancia y el control sobre los cuerpos de los demás. Viola la separación de la Iglesia y el Estado. Y obligará a las personas a continuar embarazos contra su voluntad».
Además de Wheeler, el ayuntamiento está formado por los comisionados Jo Ann Hardesty, Carmen Rubio, Mingus Mapps y Dan Ryan. Todos son demócratas.
El senador republicano Bryan Hughes, principal promotor de la nueva ley, el proyecto de ley 8 del Senado, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
La legislatura de Texas, controlada por los republicanos, aprobó el proyecto de ley, que fue firmado por el gobernador republicano Greg Abbott, a principios de este año.
Los proveedores de servicios de aborto demandaron la ley, pero la medida sigue vigente por ahora después de que la Corte Suprema dictaminara que los proveedores no cumplieron con su obligación de obtener una orden judicial preliminar.
Sin embargo, dos tribunales inferiores han bloqueado a Texas Right to Life y a las personas afiliadas al grupo para que no puedan demandar a determinados médicos o personas en virtud de la ley.
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