El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó el 22 de septiembre una nueva orden ejecutiva y presentó un paquete de propuestas legislativas para combatir la “influencia extranjera maligna”, especialmente de la China comunista.
“La fuente número uno de esa influencia, no solo en Estados Unidos sino en todo el mundo, es el Partido Comunista Chino”, dijo DeSantis durante un evento en el Miami Dade College el jueves.
De pie detrás de un podio con un cartel de “Alto a la influencia del PCCh”, DeSantis dijo que firmó una orden ejecutiva para abordar los riesgos de ciberseguridad que plantean las empresas extranjeras, especialmente aquellas que tienen vínculos con el Partido Comunista Chino (PCCh).
“Lo último que queremos ver es que [el PCCh] se meta en la información personal de las personas”, dijo DeSantis.
Dijo que la nueva orden ejecutiva prohíbe que las agencias gubernamentales de Florida adquieran o utilicen productos y servicios tecnológicos de empresas vinculadas con «países extranjeros de interés». Agregó que estos países incluyen a China, Irán, Rusia, Cuba y “otros tipos de regímenes hostiles a los intereses estadounidenses”.
«Esto evitará la exposición de la información personal de los floridanos y de los sistemas tecnológicos de Florida a entidades extranjeras y a malos actores», dijo.
“Una de las cosas que le gusta hacer [al PCCh] es usar la tecnología para promocionarse y eso incluye tratar de obtener información personal de los estadounidenses”, dijo DeSantis. TikTok era muy popular entre los adolescentes en Estados Unidos.
El gobernador destacó a TikTok de propiedad china, muy popular entre los jóvenes estadounidenses, como una preocupación.
“Están acumulando una gran cantidad de datos”, dijo sobre la aplicación. “Creo que esto es un gran riesgo para la seguridad nacional”.
La aplicación de videos cortos está fundada y es propiedad de Bytedance, un gigante tecnológico con sede en Beijing. La directora de operaciones de la compañía de redes sociales, Vanessa Pappas, confirmó al Comité de Seguridad Nacional del Senado el 14 de septiembre que sus empleados en China tienen acceso a los datos de los usuarios estadounidenses.
El representante de TikTok insistió en que la compañía tiene «controles de acceso muy estrictos sobre el tipo de datos a los que pueden acceder [los empleados con sede en China]». Pero la posibilidad de que el PCCh pudiera acceder a los datos de los estadounidenses, dado que las leyes chinas obligan a las empresas a cooperar con las agencias de seguridad cuando se les solicita, hizo que el senador Rob Portman (R-Ohio) solicitara a Pappas que corte todos los flujos de datos estadounidenses a China. Pappas no se comprometió durante la audiencia.
“Realmente tenemos que hacer mucho, mucho más”, dijo DeSantis, el 22 de septiembre.
El gobernador agregó que ha propuesto una nueva legislación para bloquear «la contratación de entidades gubernamentales con empresas que sean propiedad de, estén controladas por, o estén domiciliadas en países extranjeros de interés si el contrato proporciona acceso a la información personal de los floridanos».
«Se trata de cosas como los números de la Seguridad Social; se trata de cosas como la información de su cuenta bancaria, y se trata de cosas como sus registros médicos», continuó. «Eso no debería estar en manos del Partido Comunista Chino».
Compras de terrenos estadounidenses
Además de las preocupaciones de ciberseguridad, el gobernador del Estado del Sol advirtió sobre la compra de tierras estadounidenses por parte de grupos y empresas vinculadas al PCCh.
DeSantis señaló que las empresas afiliadas al PCCh ya han comprado terrenos cerca de bases militares en otros estados, como la Base de la Fuerza Aérea de Grand Forks en Dakota del Norte.
«¿Por qué hacen eso? Por supuesto, quieren obtener inteligencia; quieren saber qué está pasando aquí en Estados Unidos”, dijo.
Al señalar que Florida alberga 21 bases militares de todas las ramas de las fuerzas armadas, DeSantis anunció una nueva acción legislativa propuesta que frenaría la compra de tierras agrícolas y tierras cerca de las bases militares por parte de países extranjeros de interés.
A partir de 2019, más del 5 por ciento de las tierras agrícola en Florida era propiedad de inversionistas extranjeros, el quinto más alto en Estados Unidos, según el gobernador republicano. Si bien algunos de los propietarios son de países amigos como el Reino Unido, dijo que millones de floridanos necesitan “una capa de protección” del PCCh.
DeSantis ha criticado previamente al PCCh por la masiva inversión de China en bienes raíces en Florida. Un informe de julio de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios mostró que los inversionistas chinos se encontraban entre los principales compradores extranjeros de bienes raíces en Estados Unidos. Desde abril de 2021 hasta marzo, los compradores chinos gastaron 6100 millones de dólares en viviendas existentes, un 30 % más que hace un año. Florida estuvo entre los principales destinos de sus compras.
“Creo que esto es un gran problema”, dijo DeSantis cuando se le preguntó sobre el informe en una entrevista en julio con Fox News.
«No creo que deberían poder hacerlo», dijo el gobernador, en ese momento. «Creo que el problema es que estas empresas tienen vínculos con el PCCh, y no siempre es evidente a simple vista lo que hace una empresa».
Escudriñando las donaciones universitarias
DeSantis también quiere intensificar los esfuerzos para salvaguardar la propiedad intelectual de las instituciones de educación superior del PCCh.
Un proyecto de ley de 2021 exigía que las universidades divulgaran dádivas y donativos por un valor de USD 50,000 o más de los países de interés. Estos países son China, Cuba, Irán, Corea del Norte, Rusia, Siria y Venezuela.
“Pero incluso las donaciones de menos de USD 50,000 procedentes de personas y grupos que impulsan las agendas de potencias extranjeras hostiles en los campus universitarios pueden socavar la integridad académica, deformar las perspectivas de muchos estudiantes e influir en la investigación y la escritura de muchos profesores para alinearse con los intereses y valores de las fuentes de ese financiamiento”, según su oficina.
Una de las nuevas propuestas legislativas, dijo DeSantis, prohibiría “cualquier dádiva a una institución de educación superior en Florida por parte de cualquier individuo, entidad privada u organización gubernamental que esté domiciliada en un país extranjero de interés”.
El gobernador dijo que ha sido testigo de incidentes en los últimos años que involucran a estudiantes o investigadores extranjeros que vienen a universidades estadounidenses y se llevan propiedad intelectual a China.
En febrero de 2021, un exprofesor de la Universidad de Florida, Lin Yang, fue acusado de ocultar la ayuda del PCCh mientras recaudaba USD 1.75 millones en subvenciones de los contribuyentes estadounidenses para investigaciones que beneficiaron a una empresa que fundó en secreto en China. Sin embargo, Yang huyó a China en 2019 y no ha regresado a Estados Unidos.
En 2019, Moffitt Cancer Center, con sede en Florida, anunció la renuncia de su director ejecutivo y otros cinco miembros de alto nivel del personal por «violaciones de las normas de conflicto de intereses a través de su trabajo en China». La declaración se produjo luego de que la revisión interna del instituto de investigación descubriera la participación de los cinco en el Programa de los Mil Talentos, un plan de reclutamiento diseñado por el PCCh para atraer a los mejores científicos e ingenieros para trabajar en China.
Con información de Frank Fang, Eva Fu e Ivan Pentchoukov.
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