Es probable que el régimen comunista de China esté desarrollando armas cibernéticas capaces de secuestrar los sistemas satelitales de EE.UU. durante una guerra, según documentos del Pentágono recientemente filtrados.
Entre el reciente alijo de archivos de alto secreto del Pentágono, supuestamente filtrados por un Guardia Nacional Aéreo este año, hay un documento que sugiere que el Partido Comunista Chino (PCCh), que gobierna China como un estado de partido único, está «probablemente desarrollando capacidades de ciberataque que amenazarán los sistemas de satélites occidentales”.
“La [comunidad de inteligencia] evalúa que China está desarrollando capacidades de ataque cibernético para denegar, explotar y secuestrar enlaces y redes satelitales como parte de su estrategia para controlar la información, que considera un dominio de guerra clave”, dice el documento.
El documento fue clasificado como inteligencia especial de alto secreto y marcado para prohibir su divulgación a ciudadanos extranjeros.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el Pentágono en relación con este archivo.
El documento sugiere que el PCCh está desarrollando sistemas capaces no solo de desconectar los satélites estadounidenses, sino también de secuestrarlos y usarlos para los propios fines del régimen.
“La capacidad de China para infiltrarse en una red central o imitar un enlace de comando específico podría permitirle tomar el control de un satélite, haciéndolo ineficaz para apoyar las comunicaciones, las armas o los sistemas de inteligencia, vigilancia y reconocimiento”, dice el documento.
China se prepara para atacar los sistemas satelitales de EE.UU.
El documento filtrado del Pentágono presenta el último atisbo de los prolongados intentos del PCCh de desarrollar tecnologías capaces de atacar y derrotar la infraestructura estadounidense basada en satélites.
El régimen ha estado desarrollando un amplio arsenal de capacidades espaciales y contraespaciales durante años. Tales capacidades permitirían al PCCh apuntar a las infraestructuras de comunicaciones y GPS de EE.UU., así como a sus sistemas de defensa antimisiles.
La investigación de China sobre tales capacidades incluye experimentos con armas de energía dirigida, microsatélites, explosivos robóticos, bloqueadores de satélites, misiles antisatélite, satélites capturadores y un conjunto integral de herramientas de guerra cibernética.
El régimen también ha estado probando la capacidad de Estados Unidos para defender sus satélites.
En declaraciones a The Washington Post en diciembre de 2021, el general David Thompson, primer vicejefe de operaciones espaciales de la Fuerza Espacial de EE.UU., dijo que el PCCh estaba lanzando ataques contra la infraestructura espacial de EE.UU. “todos los días”.
Esos ataques reversibles, en los que la arquitectura satelital o los sistemas cibernéticos de EE.UU. se ven comprometidos temporalmente, se entienden en gran medida como pruebas de campo para un ataque real en caso de una guerra entre EE.UU. y China.
Por su parte, Estados Unidos, sus aliados y socios están invirtiendo fuertemente para implementar sistemas satelitales más nuevos y distribuidos para mitigar la amenaza que representa el PCCh.
Dichos sistemas reemplazarán los sistemas satelitales vulnerables y fuertemente centralizados de la nación con constelaciones satelitales que consisten en cientos o incluso miles de satélites.
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