Dos policías de Virginia acusados en relación a la irrupción del Capitolio de Estados Unidos, estando fuera de servicio, fueron despedidos de sus puestos de trabajo, según la ciudad de Rocky Mount, donde estaban empleados.
Jacob Fracker y Thomas Robertson fueron despedidos del Departamento de Policía de Rocky Mount, tras una revisión de su presunta participación en la irrupción del edificio del Capitolio a principios de este mes.
«El Ayuntamiento siguió los procesos necesarios para concluir nuestra revisión y notificar a estos individuos esta decisión. Seguiremos colaborando en la investigación federal cuando se nos solicite», señala una declaración de la ciudad.
La ciudad explicó que mantiene para sus oficiales altos estándares de cómo «se comportan dentro y fuera del servicio».
«El proceso por el que hemos pasado refuerza la seriedad con la que pretendemos mantener estos estándares y lo importante que es comunicar que el departamento está trabajando en el mejor interés de la seguridad de todos», añade el comunicado.
Este mes ambos fueron detenidos después de que se les identificó en una foto haciendo una declaración obscena delante de una estatua de John Stark en el interior del edificio del Capitolio, dijeron los fiscales de la Oficina del Fiscal del Distrito de Columbia.
Una investigación de la Policía del Capitolio de Estados Unidos encontró publicaciones en las redes sociales donde supuestamente Robertson era el autor y estaba admitiendo su participación en los disturbios.
«La CNN y la izquierda están enfadados porque nosotros realmente atacamos al gobierno, el que es el problema, y no a una pequeña empresa al azar», dice el posteo, según los documentos judiciales (pdf).
Fracker también fue acusado de ser el autor de otro posteo en las redes sociales, que ya fue eliminado, donde supuestamente se leía: «No es que yo haya hecho nada ilegal». Fracker también habría dicho que había sido escoltado «por» la Policía del Capitolio.
Ambos fueron acusados de un cargo de entrar o permanecer a sabiendas en algún edificio o recinto restringido sin autorización legal y de un cargo de entrada violenta y conducta desordenada en el recinto del Capitolio.
Hasta el momento, en esta causa no hay abogados asignados en el informe del expediente.
Previamente, el martes, el fiscal del Distrito de Columbia, Michael Sherwin, dijo a los periodistas durante una conferencia telefónica, que los fiscales se están preparando para presentar cargos de sedición contra algunos alborotadores por la irrupción en el Capitolio del 6 de enero.
«Estamos trabajando en esos casos y creo que los resultados darán sus frutos muy pronto», dijo Sherwin.
El principal fiscal de Washington dijo que los casos estarían relacionados con el artículo 2384 del Código de Estados Unidos, o por conspiración sediciosa, y podrían tener una pena máxima de 20 años de prisión.
Hasta ahora no se presentaron cargos de sedición en la infracción, pero sí al menos un caso de conspiración.
Los primeros cargos de conspiración se presentaron contra tres personas supuestamente afiliadas a la organización paramilitar conocida como Oath Keepers, el 19 de enero.
Los fiscales alegaron que Thomas Edward Caldwell, de 65 años, del condado de Clarke (Virginia), tuvo un papel de liderazgo en Oath Keepers y conspiró con otros para «asaltar por la fuerza» el edificio del Capitolio, según una denuncia penal (pdf) presentada el 19 de enero. La denuncia también nombra a Donovan Crowl, de 50 años, de Ohio, y a Jessica Watkins, de 38 años, de Ohio, como presuntos co-conspiradores en ese plan. Crowl y Watkins formaban supuestamente parte del grupo.
Los tres individuos y otras personas se habían comunicado entre sí con antelación a la irrupción y planearon su ataque, afirmó el agente especial del FBI, Michael Palian, en su declaración jurada. Palian dijo que había revisado las imágenes del suceso del 6 de enero y que había observado a entre ocho y diez individuos con equipo paramilitar que intentaban entrar en el edificio del Capitolio.
Estos individuos llevaban cascos, chalecos reforzados y ropa con parafernalia de los Oath Keeper, dijo Palian, y actuaban de forma «organizada y ensayada», mientras se abrían paso hacia el frente de la multitud reunida en torno a una puerta del Capitolio de Estados Unidos.
Los tres miembros fueron acusados de conspiración, conspiración para impedir o perjudicar a un funcionario, sin autoridad legal, destrucción de propiedad gubernamental, obstrucción de un procedimiento oficial, entrada violenta en un edificio o recinto restringido y conducta desordenada en el recinto del Capitolio.
En una actualización, Sherwin dijo a los periodistas que hasta ahora se han abierto más de 400 casos relacionados con el incidente del 6 de enero. Hasta el momento más de 150 personas están acusadas a nivel federal y otras 50 acusadas fuera del ámbito federal.
Siga a Janita en Twitter: @janitakan
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
