En otro síntoma más de la derrota económica impulsada por el virus del PCCh, los despidos en las pequeñas empresas con menos de 49 empleados aumentaron en un 1136 por ciento respecto al mes anterior, según el informe de una empresa de procesamiento de nóminas.
«La pandemia de COVID-19 y las acciones esenciales del gobierno para reducir la propagación del virus han impactado significativamente a las empresas en todo el país», escribió Daniel Sternberg, jefe de ciencias de la información en Gusto, en un informe del miércoles.
El cambio del 1136 por ciento en la cifra de despidos respecto al mes anterior es un promedio simple de cuatro segmentos de pequeñas empresas que Gusto rastreó y que empleaban a menos de 50 trabajadores.
El informe encontró que los más afectados fueron las empresas de 25 a 49 empleados, que experimentaron un aumento en despidos del 1631 por ciento entre febrero y marzo. Esto fue equivalente a un cambio del 6.94 por ciento respecto al mes anterior en el número de empleados.
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«Las pequeñas empresas se han visto obligadas a implementar múltiples estrategias más allá de despidos para reducir costos de nómina con el fin de superar la primera ola de refugio en el lugar y las órdenes de permanencia en el hogar», escribió Sternberg en el informe, agregando que los datos mostraron un aumento de 50 por ciento en el número de trabajadores cuyas horas se redujeron significativamente en marzo, respecto al año anterior.
Las empresas con más de 50 empleados experimentaron un aumento respecto al mes anterior en despidos de 721 por ciento, o 6.1 por ciento respecto al número de personal, según el informe.
Las empresas con menos de cinco trabajadores registraron el menor descenso de empleados, con un 1.02 por ciento respecto al mes anterior en marzo, y un correspondiente aumento del 658 por ciento en los despidos en comparación con el mes anterior.
«Una posible explicación de por qué las empresas más pequeñas tuvieron reducciones de personal relativamente más bajas podría ser que muchas de estas empresas tienen pocos o ningún empleado que puedan perder sin necesidad de cerrar por completo las operaciones. Como resultado, si estas empresas experimentan impactos de ingresos lo suficientemente significativos, pueden cerrar por completo», escribió Sternberg.
Las cifras fueron compiladas usando datos de la plataforma de Gusto y se basan en más de 100,000 pequeñas empresas en todo el país.
Las cifras de abril próximo podrían ser aún peores ya que, como señaló Sternberg, los datos del informe solo incluyen la primera mitad de marzo, antes de que muchos estados y ciudades impusieran restricciones de distanciamiento social y órdenes de permanencia en el hogar.
Sternberg advirtió que, a pesar de los «significativos tamaños de muestra» utilizados en los cálculos, la naturaleza de la distribución de clientes de Gusto significa que las conclusiones «pueden no ser totalmente representativas de la industria y del desglose geográfico de las pequeñas empresas en Estados Unidos».
La industria más afectada, tanto en términos de cambio porcentual de los despidos como de la plantilla en marzo en comparación con febrero, fue la industria de alimentos y bebidas. El sector de alimentos y bebidas registró un aumento del 9040 por ciento en los despidos y un descenso del 13.07 por ciento en la plantilla.
Le siguió la industria de los salones de belleza y salones de spa, que registró un aumento de los despidos del 7209 por ciento y un descenso de la plantilla del 8.68 por ciento, respecto al mes anterior.
«Tasa de desempleo alrededor del 20 por ciento»
El informe de Gusto sobre las tendencias de empleo en la pequeña empresa llega mientras los economistas de JPMorgan, el banco más grande de Estados Unidos, dijeran que la gravedad de la pandemia probablemente resultaría en una caída del 40 por ciento en el producto bruto interno (PBI) del país y llevaría a una tasa de desempleo del 20 por ciento.
«Con estos datos en mano creemos que el informe de empleos de abril podría indicar unos 25 millones de empleos perdidos desde la semana del sondeo de marzo, y una tasa de desempleo de alrededor del 20 por ciento», escribieron los analistas, informó CNBC. «Dado el esperado impacto en las horas trabajadas este trimestre, ahora buscamos un -40.0 por ciento de crecimiento real anualizado del PBI en el segundo trimestre, por debajo del -25.0 por ciento anterior».
Este nuevo análisis responde a un pronóstico anterior de Goldman Sachs que preveía una caída del 34 por ciento en el segundo trimestre, y a un pronóstico de Bank of America que prevé que el desempleo se dispare a más del 15 por ciento.
Las predicciones se basan en las asombrosas cifras semanales de solicitudes de desempleo, que mostraron que en las últimas tres semanas, casi 17 millones de estadounidenses han solicitado subsidios por desempleo.
Los esfuerzos para dar a la economía de Estados Unidos la mejor oportunidad de un fuerte repunte han venido de un histórico proyecto de ley de rescate COVID-19, así como de las recientes medidas del Departamento de Tesoro y la Reserva Federal para canalizar el dinero a las pequeñas y medianas empresas de Estados Unidos para animarlas a no despedir gente.
La Reserva Federal y el Tesoro anunciaron el jueves la puesta en marcha de varias nuevas facilidades de préstamo, por un total de alrededor de USD 2.3 billones, para las empresas y los gobiernos locales afectados por la pandemia del virus del PCCh.
El presidente Donald Trump, mientras tanto, ha tratado de equilibrar las necesidades para ganarse la vida de los estadounidenses con restricciones destinadas a salvar vidas. El presidente dijo en una sesión informativa en la Casa Blanca el jueves que los cierres económicos en todo el país han exigido «un tremendo costo, mentalmente, en mucha gente».
«Creo que vamos a abrir fuertemente. Creo que vamos a abrir con gran éxito, y, me gustaría decir, incluso con más éxito que antes», dijo Trump, y añadió: «Vamos a abrir (…) muy, muy, muy, muy pronto, espero».
El virus del PCCh se ha propagado agresivamente por toda la nación, y las cifras de la Universidad Johns Hopkins al momento de informar señalaban 467,184 infecciones y 16,736 muertes.
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