El acceso que los Institutos Confucio (IC) de la China comunista tienen a los datos de los estudiantes canadienses, como se puso de manifiesto recientemente en Nuevo Brunswick, hace que varios miembros de la comunidad disidente china hayan expresado su preocupación por los institutos que operan en su propio distrito escolar y en suelo canadiense en general.
Sheng Xue, una activista democrática chino-canadiense en Toronto, dijo que está muy preocupada porque el acceso a los datos de los estudiantes de los IC puede amenazar potencialmente la seguridad de los disidentes chinos que están en el punto de mira del Partido Comunista Chino (PCCh) y que tienen alguna relación con los IC.
«Una gran cantidad de pruebas objetivas demuestran que el IC no es una organización normal de intercambio educativo o cultural, sino una agencia de espionaje a través de la cual el PCCh ha penetrado en la comunidad internacional, por lo que tiene la tarea de recopilar información de inteligencia», dijo Sheng en una entrevista.
Dijo que los datos personales de cualquier persona en manos del PCCh pueden ser utilizados por éste con fines de persecución.
«Si son hijos de chinos que van a un Instituto Confucio en Canadá, corren un riesgo mayor», dijo Sheng, que también es cofundadora de la China Rights Network, un grupo que une a las comunidades que han sufrido bajo el régimen de Beijing.
Paul Chan, ejecutivo de Edmonton Hong Kong Civil Rights United, dijo a The Epoch Times que el riesgo se agrava debido a la nueva ley de seguridad nacional que Beijing impuso a Hong Kong en junio de 2020. Esa ley otorga a Beijing poderes más amplios para perseguir a los disidentes, ya sea en el extranjero o en China continental.
«Será un riesgo enorme», dijo Chan. «Bajo la nueva ley de seguridad nacional, cualquier cosa que se diga en contra del gobierno chino se considera ilegal, y no importa si se trata de ciudadanos chinos o extranjeros».
Las instituciones educativas de Canadá que siguen acogiendo a los IC son el Instituto de Tecnología de la Columbia Británica y el Distrito Escolar de Coquitlam, en la Columbia Británica, los colegios públicos de Edmonton, la Universidad de Regina, la Universidad de Saskatchewan, la Universidad de Waterloo, el centro de educación superior Seneca de Toronto, la Universidad de Carleton de Ottawa, el centro de educación superior Dawson de Montreal y la Universidad Saint Mary de Halifax.
«Acceso a las bases de datos»
El ministro de Educación de Nuevo Brunswick, Dominic Cardy, declaró el 21 de junio ante el Comité Especial de la Cámara de los Comunes sobre las relaciones entre Canadá y China que varios padres de la comunidad china de la provincia se han dirigido a él preocupados por el IC que funciona en las escuelas públicas de Nuevo Brunswick y por el acceso de su personal a la información privada de los alumnos.
«Había miembros del Partido Comunista Chino que trabajaban para el Instituto Confucio y que tienen acceso a las bases de datos y a la información de los estudiantes de Nuevo Brunswick. Me enteré por miembros de la diáspora china, que están muy preocupados por este hecho», dijo Cardy.
«Los programas supuestamente centrados en la cultura y la lengua incluyen en muchos casos una propaganda política manifiesta», señaló Cardy. Puso los ejemplos de negar la masacre de la plaza de Tiananmen de 1989, hacer que los estudiantes dibujaran mapas borrando la frontera de Taiwán con China y disciplinar a los estudiantes que planteaban preguntas sobre los abusos de los derechos humanos en China.
Cardy ha sido el impulsor de la eliminación del programa del IC en las escuelas de Nuevo Brunswick. En un anuncio realizado en agosto de 2019, dijo que la eliminación se hará en dos etapas, cerrando completamente en 2022.
Las Escuelas Públicas de Edmonton (EPS), el segundo distrito escolar más grande de Alberta, han acogido un IC desde 2007 y renovaron su contrato en octubre de 2018.
Las EPS ofrecen una programación bilingüe en mandarín a más de 2000 estudiantes, y el IC proporciona «apoyo lingüístico y cultural», dijo Megan Normandeau, consultora de comunicaciones del distrito escolar, en un correo electrónico.
Normandeau señaló que las EPS no han «experimentado desafíos con el Instituto Confucio» similares a los descritos por Cardy. Se rechazó una solicitud de entrevista.
Cuando le preguntaron si el IC tiene acceso a los datos personales de los estudiantes, Anna Batchelor, otra consultora de comunicaciones de las EPS, respondió en un correo electrónico que «los profesores visitantes del Instituto Confucio trabajan bajo la supervisión directa de un profesor de la División y no tienen acceso a nuestros sistemas de datos ni a la información confidencial de los estudiantes».
«Difícil de confiar»
Sheng dijo que el PCCh puede obtener los datos personales de cualquier persona a la que apunte a través de varios métodos de vigilancia y rastreo.
Sheng añadió que muchas personas y organizaciones de Canadá no son conscientes ni están atentas a los métodos de persecución del régimen chino.
«Como el PCCh es tan bueno mintiendo y fingiendo, y al mismo tiempo utilizando mucho dinero y grandes beneficios materiales para ganarse a la otra parte, muchas personas han sido engañadas sin darse cuenta», dijo.
«Algunas personas son invitadas a China para disfrutar de una hospitalidad de lujo de alto nivel. El PCCh también da dinero y regalos, y presta especial atención a las preferencias y necesidades personales. Después de regresar a Canadá, muchas personas no pueden evitar empezar a pensar y hablar en favor de los intereses del PCCh».
Danny Vo, otro miembro de Edmonton Hong Kong Civil Rights United, dijo que los padres deberían solicitar que las EPS examinaran el plan de estudios del IC.
«Esto no es algo que podamos pasar por alto. Como podemos ver, China se está volviendo más seria con su poder blando y está tratando de apoderarse básicamente de todos los aspectos globales», dijo.
«Es realmente difícil confiar (…) en ese tipo de programas porque simplemente no se sabe».
Kerri Palmer Isaak, presidenta de la junta directiva del Distrito Escolar de Coquitlam, dijo en un correo electrónico que las escuelas del distrito no han tenido ningún problema con el IC.
Cuando le pidieron que confirmara si el IC tiene acceso a los datos personales de los alumnos, Isaak dijo que el «programa es una clase optativa extraescolar para los alumnos y sus padres los habrán inscrito. Pongo en cc a nuestro personal para proporcionar una mayor claridad».
Sin embargo, el personal de Isaak no proporcionó ninguna respuesta de seguimiento.
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