El líder iraní, Hassan Rouhani, presionó más duro el 8 de abril por un préstamo de emergencia de 5000 millones de dólares, que Irán busca para luchar contra el brote del virus luego que un funcionario del régimen acusara a Estados Unidos de bloquear el préstamo.
En un tuit del domingo, el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, Ali Shamkhani, acusó a Estados Unidos de bloquear el pedido de préstamo de Teherán al FMI.
The Wall Street Journal reportó que Estados Unidos planea bloquear el pedido de Irán de un préstamos del FMI.
El Departamento del Tesoro de EE. UU. no respondió a un pedido de comentario de The Epoch Times al momento de la publicación de este informe.
Irán no ha solicitado ayuda del FMI desde la Revolución Islámica de Irán en 1979.
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«Les pido a las organizaciones internacionales que cumplan sus tareas … Somos miembro del FMI», dijo Rouhani en una reunión de gabinete televisada. «No debería haber discriminación en darnos préstamos».
Un funcionario del FMI dijo que mantiene charlas con Irán con el propósito de evaluar si Irán califica para un préstamo de emergencia, según Reuters.
Teherán ha culpado a Estados Unidos y a su política de «máxima presión» de restringir la posibilidad de Irán de responder efectivamente al virus.
«Las sanciones de EE. UU. a Irán son terrorismo económico y médico … Están en violación de las convenciones médicas internacionales», dijo Rouhani.
La administración de Trump impuso sanciones a Irán en 2018, con el fin de cortar los «ingresos que el régimen [iraní] usa para financiar grupos terroristas, fomentar la inestabilidad global, financiar programas de misiles balísticos y nucleares, y enriquecer a sus líderes», dijo en ese tiempo la Casa Blanca.
¿Puede Irán afrontar financieramente la batalla contra el virus del PCCh?
El gobierno iraní tiene miles de millones de dólares en cuentas que todavía puede usar, dijeron funcionarios de la administración de Trump al Wall Street Journal. Si se le da a Irán el préstamo de emergencia pedido, su gobierno puede desviar los fondos para darle un empuje a la economía del país, debilitada por las sanciones de EE. UU., o financiar el terrorismo en Medio Oriente, dijeron los funcionarios.
Según el Departamento de Estado, el régimen iraní rechazó la oferta de Estados Unidos de «ayuda humanitaria y suministros médicos al pueblo iraní», que tenía la intención de contrarrestar el brote de COVID-19.
El secretario de estado de EE. UU., Mike Pompeo, recordó al régimen el 28 de febrero que «ciertas donaciones a Irán que tienen la intención de aliviar el sufrimiento humano, incluyendo la donación de medicina, están exceptuadas de las sanciones de EE. UU. Además Estados Unidos mantiene amplias excepciones y autorizaciones a sus sanciones para la exportación de alimento, medicina, dispositivos médicos, y productos agrícolas a Irán».
Estados Unidos estableció en octubre de 2019 un canal transparente con el gobierno suizo a través del cual la ayuda humanitaria puede fluir a Irán. Los pagos a exportadores están garantizados por un banco suizo. Sin embargo tienen que cumplir con un «muy alto estándar de debida diligencia», contó el representante especial de EE. UU., Brian Hook, a Reuters durante una charla de prensa en enero luego de las primeras ventas de drogas para el cáncer y trasplantes a Irán.
El Departamento de Estado dijo que según los documentos iraníes, las compañías de salud de Irán han importado kits de prueba para el COVID-19 desde enero.
El gobierno iraní tiene cientos de miles de millones de dólares en su fondo soberano de riqueza, y también controla los fondos de inversión del supremo líder de Irán, ayatolá Ali Khamenei, que incluyen activos confiscados a gente iraní. Todos estos fondos pueden ser usados para combatir el brote del COVID-19, dijo el Departamento de Estado.
El 6 de abril, Khamenei aprobó el retiro de mil millones de dólares del fondo soberano de riqueza de Irán para combatir al virus del PCCh (Partido Comunista Chino), conocido comúnmente como nuevo coronavirus.
Brian Hook, representante especial para Irán, dijo en una conferencia de prensa el 16 de marzo que si el régimen redirige solo una porción de sus ingresos generados del petróleo y otras ventas que usa para financiar el terrorismo, podría mejorar significativamente su sistema de salud para el beneficio de la gente iraní. Podría haber estado mucho mejor preparado para la pandemia del COVID-19.
«El régimen iraní ha controlado por 41 años un sector financiero opaco, que causa que los bancos sean muy reacios a tratar con un régimen famoso y conocido por el lavado de dinero y el financiamiento del terror», dijo Hook. Abrir el sector financiero iraní y hacerlo transparente alentaría a muchas instituciones financieras a realizar transacciones con el régimen, agregó Hook.
Hasta la fecha, se han confirmado en Irán 68,192 casos de COVID-19, 4232 personas murieron y 35,465 se recuperaron, según la Universidad John Hopkins.
Irán ha tenido una sociedad estratégica con China, la cual le ayudó al país a evitar las sanciones de EE. UU. Irán ha importado materiales embargados de China mientras continúa vendiendo petróleo al régimen chino. Irán también permitió vuelos desde y hacia China hasta fines de febrero.
Reuters contribuyó con este informe.
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