Por qué fallan las resoluciones de año nuevo y cómo hacer que funcionen

Muchas personas ven el año nuevo como un buen momento para establecer metas. Es una mentalidad de «año nuevo, persona nueva», pero la investigación de U.S. News and World Report muestra que solo el 20 por ciento de nosotros tenemos éxito con nuestros objetivos. En otras palabras, el 80 por ciento de nosotros es probable que fallemos. ¿Por qué es esto?

La razón principal por la cual las resoluciones de Año Nuevo fallan, en mi opinión, se debe a dos factores compuestos. El primero es que muchas personas no saben cómo crear nuevos hábitos. Crear hábitos es un trabajo duro. Requiere constancia en una nueva rutina y trabajar hacia su objetivo todos los días. La consistencia es la única forma de crear nuevas conexiones neuronales en el cerebro que apoyen aquello en lo que está trabajando. Una vez que se forman nuevas conexiones neuronales, su nueva rutina se convertirá en un hábito y será mucho más fácil de mantener, pero llegar allí es el desafío.

Si se ha movido más allá de este obstáculo, lo felicito, pero aún así, puede no tener éxito, a menos que haya abordado el segundo problema: la mayoría de las personas no tienen una rutina diaria para hacer algo agradable.

¿Cómo puede esperar mantener una resolución de Año Nuevo con respecto a algo con lo que ha luchado cuando ni siquiera hace algo a diario en lo que es bueno y disfruta? Piense en ello como salida de baja energía versus salida de alta energía. Se necesita mucho menos esfuerzo para hacer cosas divertidas o relajantes que para hacer cosas desafiantes, ¿verdad? Correcto.

No importa cuán atento esté, todos tenemos tiempo y energía limitados para hacer todo: ¿cuánta energía es realista para alcanzar un nuevo objetivo difícil, versus mantenerse al día con todo lo que ya tiene en su plato?

Si crea una rutina diaria haciendo algo que disfrute antes de establecer cualquier otro tipo de resolución, se habrá dado un impulso. Esto respaldará el tipo de confianza y compromiso que necesita para alcanzar un objetivo más difícil.

Cultivar la felicidad a través de este nuevo hábito diario también le da más energía para lograr el resto de sus objetivos. Las personas más felices son más saludables y tienen una perspectiva más positiva de la vida. Las personas con una rutina diaria constante también se sienten más seguras de sí mismas, porque la mente anhela la coherencia para estar saludable.

Ahora veamos el paradigma de salida de baja energía versus salida de alta energía. Cuando se acostumbra a poner constantemente una baja cantidad de energía en algo nuevo, es relativamente fácil aumentar eso, a una salida de alta energía; más de lo que sería pasar de la nada a todo de una vez. Es mucho más difícil hacer rodar una piedra estática que acelerar una piedra que ya está rodando. En otras palabras, los pequeños hábitos conscientes se convierten en hábitos más grandes, dándole la capacidad de hacer cambios difíciles.

Tengo algunas cosas conscientes que hago a diario que me ayudan a mantener una actitud positiva, concentrada y feliz. Una es comenzar cada día con una taza de té. Otro hábito diario es dar una larga caminata. Hago ambas cosas porque las disfruto, no porque me sienta obligada a hacerlo. Ambas cosas me dan el apoyo que necesito para abordar mis objetivos más grandes. ¿Qué será para usted? ¿Con qué puede comprometerse cada día que lo haga feliz?

Jaya Jaya Myra es una experta en estilo de vida de bienestar y experta en medios de comunicación sobre el bienestar de la mente y el cuerpo, el control del estrés, la atención plena, la alimentación para el estado de ánimo y la vida natural y saludable. Es una de las autoras más vendidas, TEDx y oradora motivadora, y creadora del Método WELL para una vida saludable llena de propósitos. Visite www.JayaJayaMyra.com

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