Proponen a académica anti-Trump como posible perito especial en caso sobre los registros de Trump

Por Zachary Stieber
30 de agosto de 2022 11:32 AM Actualizado: 30 de agosto de 2022 11:32 AM

Una jueza federal que estudia la posibilidad de nombrar a un perito especial para examinar los registros incautados al expresidente Donald Trump ha recibido una lista de cuatro académicos especializados en el privilegio ejecutivo, entre ellos uno que lleva años hablando con fuerza contra Trump.

Un grupo llamado los Consejeros de Seguridad Nacional dijo el 29 de agosto a la jueza de distrito de Estados Unidos Aileen Cannon, una persona nominada por Trump que está sopesando si nombrar al perito especial para examinar los registros incautados por los agentes del FBI, que identificó a cuatro «expertos excepcionalmente calificados» que podrían servir como el perito especial si Cannon decide que se necesita uno.

La acumulación de experiencia en materia de privilegio ejecutivo «califica de manera única a cualquiera de estos individuos para servirle hábilmente como perito especial, si decide nombrar uno», dijo Kel McClanahan, director ejecutivo del grupo, en una carta a Cannon.

Una de las personas, la profesora de derecho de la Universidad Northwestern Heidi Kitrosser, ha sido vocalmente anti-Trump durante años, como lo muestra una revisión de sus posteos en las redes sociales.

Este mismo mes, Kitrosser llamó a Trump «una amenaza existencial para la democracia».

También lo ha descrito como «desvergonzado», «sin carácter», narcisista, con una «peligrosa obsesión por el control de la imagen», «cobarde» y con una política de inmigración intolerante.

Kitrosser también ha promovido la teoría de que el presidente ruso Vladimir Putin controla a Trump, compartiendo una publicación en su blog en 2018 titulada «Tenga en cuenta que Putin maneja a Trump con zanahorias y palos», que calificó de «bastante escalofriante» e «importante».

En otros posteos, Kitrosser expresó su apoyo a los republicanos anti-Trump, incluyendo a la representante Liz Cheney (R-Wyo) y al senador Mitt Romney (R-Utah), y a los funcionarios del gobierno despedidos o criticados por violar la política y/o las leyes del gobierno, como el ex director interino del FBI Andrew McCabe y el exfuncionario del Departamento de Justicia Bruce Ohr.

Kitrosser no respondió a una solicitud de comentarios ni tampoco lo hizo Andrew Knopf, un abogado que presentó la lista ante el tribunal.

McClanahan también ha denigrado con frecuencia a Trump en Internet, según se desprende de una revisión de los Consejeros de Seguridad Nacional, de los que se le identifica como director.

McClanahan, por ejemplo, dijo el 29 de agosto: «No quiero traer mala suerte, pero en serio, solo Donald Trump podría robar la derrota de las fauces de la victoria en un año de elecciones de mitad de período simplemente siendo arrogante, narcisista y delirante».

Los otros tres

Los otros tres candidatos propuestos a Cannon son Mark Rozell, decano de la Escuela Schar de Política y Gobierno de la Universidad George Mason, Mitchel Sollenberger, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Michigan-Dearborn, y Jonathan Shaub, profesor adjunto de Derecho en la Facultad de Derecho Rosenberg de la Universidad de Kentucky.

Shaub dijo recientemente que las reclamaciones de Trump de privilegio ejecutivo sobre los registros mantenidos en Mar-a-Lago «simplemente malinterpreta lo que es el privilegio ejecutivo», diciendo a Reuters: «La persona que debe decidir si se hace valer el privilegio ejecutivo es el presidente, por lo que el perito especial sería [el presidente Joe] Biden».

La archivista de Estados Unidos rechazó previamente las reclamaciones de privilegio ejecutivo de Trump, después de que Biden se remitiera a ella, según una carta publicada recientemente.

Shaub dijo que nunca ha sido un perito especial, pero tiene experiencia en el privilegio ejecutivo, trabajando en el asunto cuando estuvo en la Oficina de Asesoría Legal y cree que es por eso que su nombre fue propuesto.

«Los otros académicos mencionados en la presentación son algunas de las personas más conocedoras del país sobre el privilegio ejecutivo, y me sentí honrado de ser incluido entre ellos», dijo a The Epoch Times en un correo electrónico.

Rozell y Sollenberger no respondieron a las solicitudes de comentarios.

Suelen escribir juntos artículos de opinión. En uno de marzo, elogiaron la decisión de Biden de no respaldar las reclamaciones de privilegio ejecutivo de Trump sobre los documentos solicitados por el panel de la Cámara de Representantes que investiga la irrupción en el Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021.

«El presidente Biden, al negarse a actuar para obstaculizar al Congreso, hizo bien en defender el valor de la transparencia en nuestra democracia constitucional. Pero también actuó como presidente para rechazar una afirmación de privilegio de su predecesor. Esto es exactamente lo que pretendía la Constitución, ya que solo una persona tiene los deberes y el poder de presidente», escribieron entonces. «Nadie más, especialmente un ciudadano privado —incluso un expresidente— puede ejercer también el poder presidencial. A pesar de los argumentos en contra, no hay leyes ni órdenes ejecutivas que puedan cambiar esa proposición fundamental».


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