Beijing ha considerado la posibilidad de invadir las islas Pratas de Taiwán, pero no organizará un ataque antes de que la presidente de la isla, Tsai Ing-wen, termine su mandato en 2024, según ha declarado un alto funcionario de seguridad taiwanés.
«Atacar y capturar las islas Pratas, y usar la guerra para obligar a Taiwán a entablar conversaciones, este escenario en nuestra evaluación no sucederá durante el mandato de la presidente Tsai», dijo el 4 de noviembre a los legisladores Chen Ming-tong, director general de la Oficina de Seguridad Nacional de la isla autónoma.
Las islas Pratas controladas por Taiwán, que se encuentran a unas 190 millas al sureste de Hong Kong, han sido particularmente vulnerables a los ataques debido a su proximidad a China continental, dijeron algunos expertos.
«Francamente, ya se ha debatido internamente sobre ello», dijo. «Por supuesto que tenemos cierta conciencia de la situación», dijo Chen.
Chen, que estaba respondiendo a una pregunta de un legislador del Kuomintang, el principal partido de oposición de Taiwán, sobre las posibilidades de un ataque chino mientras Tsai esté en el cargo, no dijo cómo se enteró de tales deliberaciones.
Taiwán, descrita durante mucho tiempo por Beijing como una región escindida, ha experimentado una marcada escalada del acoso militar chino durante el año pasado. A principios del mes pasado, Beijing puso a la isla en alerta al volar casi 150 aviones de combate durante un período de 4 días en la zona de defensa de Taiwán, la mayor demostración de fuerza hasta la fecha.
Chen hizo los comentarios solo un día después de que el Pentágono advirtiera sobre la creciente capacidad nuclear de China, que está en camino de multiplicarse por cinco en la próxima década.
Un informe reciente del Centro de Seguridad y Tecnología Emergente de la Universidad de Georgetown también encontró que el ejército chino está desplegando inteligencia artificial con el propósito de simular juegos de guerra para una invasión a Taiwán.
El general Mark Milley, presidente del Estado Mayor Conjunto, expresó el miércoles la misma opinión que Chen, diciendo que es poco probable que China se apodere de Taiwán por la fuerza militar en un futuro cercano, o lo que él definió como dentro de una ventana de “6, 12, tal vez 24 meses».
«Habiendo dicho eso, sin embargo, los chinos están construyendo clara e inequívocamente la capacidad para brindar esas opciones a los líderes nacionales, si así lo desean, en algún momento en el futuro», dijo Milley en el Foro de Seguridad de Aspen. «Pero cualquier cosa puede pasar», agregó.
Estados Unidos no tiene lazos diplomáticos formales con Taiwán, pero proporciona a la isla equipo militar suficiente para su autodefensa, como lo requiere la Ley de Relaciones de Taiwán de 1979. Washington también mantiene una política de «ambigüedad estratégica» hacia la isla, bajo la cual es deliberadamente vago sobre si acudirá en ayuda de Taiwán si Beijing ataca.
El creciente arsenal nuclear de China podría darle al régimen una ventaja sustancial en caso de un conflicto militar sobre Taiwán, dijeron los expertos a The Epoch Times.
«Si los chinos y los estadounidenses lucharan hasta un punto muerto a un nivel convencional, podría ser plausible que quienquiera que tenga el dominio nuclear esté en la mejor posición para ganar la guerra, o al menos lograr que el otro lado retroceda», dijo en una entrevista anterior Michael O’Hanlon, un miembro senior del Brookings Institution centrado en temas de defensa.
El ministro de Defensa de Taiwán advirtió recientemente que China sería totalmente capaz de invadir Taiwán para 2025.
Milley, sin embargo, dijo que Estados Unidos «tiene absolutamente la capacidad» de defender Taipei «si es necesario».
«No hay duda de eso», dijo.
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