El líder chino Xi Jinping se reunió en Shanghai con la jefa ejecutiva de Hong Kong Carrie Lam el 4 de noviembre, y los medios de comunicación estatales chinos informaron que Xi aprobó el desempeño de su administración durante los casi seis meses de protestas masivas en el territorio.
Esta es la primera vez que Xi se reúne con Lam desde que los hongkoneses iniciaron el mayor movimiento de protestas de la historia de la ciudad, generado por la oposición a un proyecto de ley de extradición que habría permitido a China continental trasladar individuos de Hong Kong y juzgarlos en los tribunales controlados por el Partido Comunista Chino (PCCh).
En medio de la creciente presión, Lam anunció en septiembre que el proyecto de ley sería archivado.
Los disturbios han constituido uno de los mayores desafíos políticos para el régimen chino. Incluso después de que se retirara el proyecto de ley, los hongkongers han seguido protestando, pidiendo el sufragio universal en las elecciones municipales y una investigación independiente del uso de la fuerza por parte de la policía contra los manifestantes.
Reunión
Lam viajó a Shanghai el 31 de octubre para asistir a la Exposición Internacional de Importación de China. El evento comenzó en 2018 como parte de la iniciativa «La Franja y la Ruta» (OBOR, por sus siglas en inglés), el proyecto insignia de la política exterior china para el desarrollo de infraestructura e inversiones en el extranjero, en un intento de ganar peso geopolítico.
El medio de comunicación estatal chino Xinhua, informó que Xi Jinping se reunió con Lam el 4 de noviembre durante la exposición y escuchó el informe de Lam sobre la situación en Hong Kong.
«El gobierno central confía mucho en usted. Aprobamos los esfuerzos que usted y su equipo han hecho», dijo Xi a Lam según es citado en el informe. «Actualmente, la tarea más importante en Hong Kong es detener la violencia y restaurar el orden».
Xi dijo a Lam que «castigar las actividades violentas» es la solución correcta, y le pidió que «lo hiciera sin vacilar».
Lam viajará a Beijing el 5 de noviembre y se reunirá con su jefe directo, el viceprimer ministro Han Zheng, el 6 de noviembre. Será la primera reunión de Lam con Han Zheng, el principal funcionario de Beijing a cargo de la gestión de los asuntos de Hong Kong, desde que comenzaron las protestas masivas.
Los comentarios de Xi Jinping se producen poco después de que la élite del Partido Comunista Chino (PCCh) señalara una postura más firme sobre Hong Kong, incluso durante la cuarta sesión plenaria, un importante cónclave político, que concluyó el 31 de octubre. Según el comunicado del pleno, el Partido discutió en relación a Hong Kong «el establecimiento y perfeccionamiento de un sistema legal y un mecanismo de aplicación de la ley» para «salvaguardar la seguridad nacional».
Shen Chunyao, director de la Comisión de Leyes Básicas de Hong Kong y Macao, también habló sobre los planes de Beijing para el territorio durante una conferencia de prensa el 1 de noviembre, celebrada después del plenario.
Shen mencionó la «mejora» de la policía local, así como la garantía de que los candidatos políticos para el cargo de jefe del ejecutivo sean pro-Beijing, y que solo los funcionarios que encabezan la legislatura del Partido tienen derecho a interpretar la Ley Básica, la mini-constitución de Hong Kong.
Análisis
El recuento de la reunión por parte del medio de comunicación estatal chino sugiere que Xi Jinping aprobó un enfoque más estricto hacia los manifestantes, ya que Xi dijo que estaba de acuerdo con el manejo de Lam de las «actividades violentas», señaló el comentarista estadounidense Tang Jingyuan.
Lam ya había emitido una Ordenanza de Regulaciones de Emergencia, una ley de la era colonial, para prohibir el uso de máscaras faciales durante las reuniones públicas, sin discusión o votación por parte de la legislatura de Hong Kong. Señaló que la prohibición disuadiría a los manifestantes, que a menudo llevan máscaras para proteger su identidad, del «incremento de violencia«.
Tang Jingyuan predijo que después de la aprobación de Xi, Lam podría continuar promulgando reglamentos bajo la ordenanza. Tang también indicó que la reunión dejó ver que Xi no reemplazará a Lam de inmediato.
«Basado en lo que ha sucedido en los últimos meses, creo que hay dos razones: Xi no puede garantizar que su sustituto le pueda ser leal, debido a las diferencias entre facciones dentro del PCCh. Además, Xi quiere que Lam siga [usando la fuerza para manejar las protestas]», apuntó Tang en una entrevista.
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